Los cristianos están libres para amarse, se nos manda a amar a nuestros hermanos a nuestros padres a nuestros enemigos, por eso los testigos de Jehova no se inscriben en los ejércitos, los cristianos con los que usted se asocia si van a matarse unos a otros, todas las religiones hacen eso, menos los cristianos verdaderos que están en el camino estrecho y pocos andan en el.

Tener relaciones sexuales a lo libre o libremente es un pecado por lo que se expulsa a los pecadores de esa clase de la congregación cristiana.

Jesucristo restauró la norma original de Dios acerca de la monogamia
(Mt 5:32; 19:9) y condenó la fornicación, equiparándola a razonamientos inicuos, asesinatos, robos, falsos testimonios y blasfemia, todo lo cual proviene del interior del hombre, de su corazón, y lo contamina.
(Mt 15:19, 20; Mr 7:21-23.)

Más tarde, el cuerpo gobernante de la congregación cristiana, compuesto por los apóstoles y los ancianos que estaban en Jerusalén, escribió a los cristianos en 49 E.C., prohibiéndoles la fornicación, que colocó al mismo nivel que la idolatría y el consumo de sangre.
(Hch 15:20, 29; 21:25.)


El apóstol Pablo señala que la fornicación es una de las obras de la carne, lo opuesto al fruto del espíritu de Dios, y advierte que el practicar las obras de la carne impedirá que un individuo herede el Reino


Su consejo es que el cristiano amortigüe su cuerpo “en cuanto a fornicación”. (Col 3:5.)


La fornicación es una ofensa por la que un individuo puede ser expulsado de la congregación cristiana.

1Co 5:9-13
En mi carta les escribí que cesaran de mezclarse en la compañía de fornicadores, 10*no [queriendo decir] enteramente con los fornicadores de este mundo, o personas dominadas por la avidez y los que practican extorsión, o idólatras. De otro modo, ustedes realmente tendrían que salirse del mundo. 11*Pero ahora les escribo que cesen de mezclarse en la compañía de cualquiera que, llamándose hermano, sea fornicador, o persona dominada por la avidez, o idólatra, o injuriador, o borracho, o que practique extorsión, y ni siquiera coman con tal hombre. 12*Pues, ¿qué tengo yo que ver con juzgar a los de afuera? ¿No juzgan ustedes a los de adentro, 13*mientras Dios juzga a los de afuera? “Remuevan al [hombre] inicuo de entre ustedes.”



Heb 12:15, 16.
15 vigilando cuidadosamente que nadie quede privado de la bondad inmerecida de Dios; que no brote ninguna raíz venenosa y cause perturbación, y que muchos no sean contaminados por ella; 16*que no haya ningún fornicador ni nadie que no aprecie cosas sagradas, como Esaú, que a cambio de una sola comida vendió regalados sus derechos de primogénito




El apóstol explica que un cristiano que comete fornicación peca contra su propio cuerpo, pues usa los órganos de la reproducción para fines ilícitos. Este proceder afecta muy adversamente a la persona en sentido espiritual, trae deshonra a la congregación de Dios y hace que dicha persona quede expuesta al peligro de enfermedades venéreas mortíferas.


1Co 6:115-20.

15 ¿No saben que sus cuerpos son miembros de Cristo? ¿Quitaré yo, pues, los miembros del Cristo y los haré miembros de una ramera? ¡Jamás suceda eso! 16*¡Qué! ¿No saben que el que se une a una ramera es un solo cuerpo? Porque: “Los dos —dice él— serán una sola carne”. 17 Pero el que se une al Señor es un solo espíritu. 18 Huyan de la fornicación. Todo otro pecado que el hombre cometa está fuera de su cuerpo, pero el que practica la fornicación peca contra su propio cuerpo. 19*¡Qué! ¿No saben que el cuerpo que ustedes son es [el] templo del espíritu santo que está en ustedes, el cual tienen de Dios? Además, no se pertenecen a sí mismos, 20 porque fueron comprados por precio. Sin falta, glorifiquen a Dios en el cuerpo que son ustedes.