Iniciado por
MagAnna
tan sólo le diré que tengo TODO mi garage empantanado con tropecientas piezas sueltas y grasientas; mi lavadora ya NO aguantó (...); llega mi hijo mayor con otra lavadora que, según su novia y él, funciona a la perfección; y, allí me tenía anoche con FUGAS de agua mientras centrifugaba; hoy, ¡la que se rinde, soy yo!; y mis uñas, pobres (...); este verano, le había tocado el turno ¡al lavavajillas y a la secadora!; y, ¡sigo SIN poder abrir el maletero de mi coche!; en fin, que todos males vengan de por ahí...