Manifestó notablemente su existencia por medio de visiones y ángeles

Éxo. 24:10, 11 “Llegaron a ver al Dios de Israel. Y debajo de sus pies había lo que se parecía a una obra de losas de zafiro y a los mismos cielos por pureza. ...los hombres distinguidos de los hijos de Israel... consiguieron una visión del Dios verdadero.”

Dan. 7:7, 9, 13 “Seguí contemplando en las visiones de la noche... hasta que se colocaron tronos y el Anciano de días se sentó. Su ropa era blanca justamente como la nieve, y el cabello de su cabeza era como lana limpia. Su trono era llamas de fuego; sus ruedas eran un fuego ardiente. Seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea! con las nubes de los cielos sucedía que venía alguien como un hijo del hombre; y al Anciano de días obtuvo acceso.”

Luc. 1:19 “En respuesta el ángel le dijo: ‘Yo soy Gabriel, que estoy de pie cerca y delante de Dios, fui enviado para hablar contigo.’”

Éxo. 19:16, 20; 20:1 “Al tercer día cuando vino a ser la mañana aconteció que empezaron a ocurrir truenos y relámpagos, y una nube densa sobre la montaña y un sonido muy fuerte de cuerno, de manera que empezó a temblar toda la gente que estaba en el campamento. De modo que Jehová descendió sobre el monte Sinaí a la cima de la montaña. ...Y procedió Dios a hablar todas estas palabras.” (Compare Hech. 7:53; Heb. 2:2.)