El hombre mismo es un alma

Gén. 2:7 “Procedió Jehová Dios a formar al hombre del polvo del suelo y a soplar en sus narices el aliento de vida, y el hombre vino a ser alma viviente.”

1 Cor. 15:45 “Así también está escrito: ‘El primer hombre Adán vino a ser alma viviente.’”

Deu. 24:7 “En caso de que se halle a un hombre secuestrando a un alma de sus hermanos de los hijos de Israel, y la haya tratado tiránicamente y la haya vendido, ese secuestrador entonces tiene que morir.”

1 Ped. 3:20 “Que en un tiempo habían sido desobedientes cuando la paciencia de Dios estaba esperando en los días de Noé, mientras se construía el arca, en la cual unas pocas personas, es decir, ocho almas, fueron llevadas a salvo a través del agua.”