En directo, vía satélite, conectamos con el hilo "Milagro sin explicación en pleno siglo XXI "

(¿Y para esto tuvo que dejar Alemania Von Braun?...... Bueno, aunque solo fuera para esto. Donde esté EEUU que se quite la URSS y sus gélidos gulags)

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Y…….., año tras año, vez tras vez…., estamos en el 2016. Ya nada llama la atención, y menos este hilo y este “milagro”, pseudomilagro, “efecto maravilloso”, “trampa de los pérfidos curas”, suceso inexplicable, suceso supersticioso o suceso tramposo. Da igual…, pero de nuevo, otra vez:

https://es.toluna.com/opinions/26161...Pantale%C3%B3n

El misterio de la sangre licuada de San Pantaleón

Junto a la Plaza de Oriente reposa uno de los grandes misterios de Madrid uno que precisamente se produce hoy, 27 de julio, y así se viene produciendo desde hace siglos. Para ponerle cara tenemos que encaminarnos al Real Monasterio de la Encarnación, allí, un milagro o suceso inexplicable congrega, año tras año a miles de personas.

Primero hablemos del escenario. Este monasterio, fundado por la reina Margarita de Austria, quien fuese esposa de Felipe III a inicios del Siglo XVII, cuenta con un patrimonio excepcional que lo hacen una de las visitas más recomendables de la ciudad. Sin embargo, de toda su amplia colección nosotros vamos a quedarnos con un objeto casi único en el mundo y que todos los años provoca la llegada masiva de miles de fieles. Se trata de una ampolla que contiene unas gotas de sangre de San Pantaleón y que, cada 27 de julio, coincidiendo con la festividad del santo, sufre una curiosa metamorfosis.

Antes de entrar en materia diremos que San Pantaleón nació en la actual Turquía a finales del Siglo III y fue martirizado por abrazar la fe cristiana. Decapitado, el 27 de julio del año 305, cuenta la tradición que varios fieles recogieron con algodones la sangre del santo y la guardaron en distintas ampollas que terminaron repartidas por todo el continente. Una de ellas llegó a Madrid en 1611 a modo de regalo. Pronto, aquel presente comenzó a levantar comentarios por el suceso que se producía y aún hoy produce. Durante todo el año permanece en estado sólido y con una tonalidad oscura, no obstante, horas antes de que llegue el 27 de julio la sangre se empieza a licuar y adquiere un color más brillante. Un prodigio que se puede admirar, cara a cara, y que dura 48 horas, cuando la sangre se vuelve a solidificar.

En el Siglo XVII la propia Inquisición quiso ahondar en el tema para ver si había algún tipo de truco o engaño. Por ello envió a distintos testigos durante siete años consecutivos, desde 1723 a 1730, para que diesen fe de lo que allí ocurría y certificasen que no había ni trampa ni cartón. Estas personas, de la confianza del Santo Oficio dieron constancia del milagro y así quedó reflejado en un documento titulado Información sobre la licuación de la sangre del glorioso mártir de San Pantaleón, fechado en el 30 de agosto de 1730 y que aún conservan en el monasterio.

La tímida y calmada vida de este lugar, donde aún habitan unas pocas monjas, se ve interrumpida cada 27 de julio. Es entonces cuando miles e personas desfilan por su iglesia y agolpan en su acceso para apreciar en primera persona la ampolla del santo y la materialización de un misterio inexplicable que acude, puntual, a su cita con el calendario en el corazón de Madrid. Y mejor que sigua siendo así ya que las contadas excepciones que no se ha producido se rumorea que siempre ha sido para vaticinar algún tipo de desgracia.

http://www.secretosdemadrid.es/el-mi...san-pantaleon/