Como son retrógradas las catedrales góticas, derribémoslas, ¿no? (genéticamente hablando, no creo que hayan muchas diferencias entre la catedral de Colonia y la chabola de la esquina). Pero…, retrógradas son, por supuesto (¡y no digamos de las románicas!).Iniciado por EsquizOfelia
En las monarquías democráticas, hay leyes incluso para la Corona. En el franquismo, la ley era Franco, que pudo elegir el monarca que le sucediera. Se acabaron derechos derivados de la genética pues el poder viene del pueblo (el parlamento actual) o de Franco (que ganó una guerra). La monarquía actual democrática es un símbolo del estado como la bandera o el himno, y basa su legitimidad en una tradición histórica que se remonta a hace un montón de siglos. Y así pasa en el resto de monarquías europeas, donde el gobierno no está en el monarca, y éste es una figura cuasi decorativa que representa la nación, que es una nación de siglos. Viven muy bien, y el heredero vive muy bien, sabiendo que su cometido es ser un símbolo y representación de la nación de la que será rey. Si ese símbolo y representación no diera ejemplo o fuese antiejemplar, pues yo estaría a favor de que el parlamento buscase otro rey. Así se intentó en la revolución que derrocó a Isabel II en el siglo XIX…, aunque el horno no estaba para bollos entonces, y todo terminó en el fiasco de Amadeo I y la I República. Al final, se trajo al hijo de Isabel II, o sea, Alfonso XII.Iniciado por EsquizOfelia a Madovi
Exacto. Tienen monarquía los países que tienen HISTORIA. No quiero decir que los que no la tengan no tienen Historia, sino que la monarquía es una institución de una nación con Historia.Iniciado por Zampabol
No. La Historia de España no empieza en octubre de 1982, cuando empezó a gobernar la izquierda en España (con un previo del Frente Popular durante la II República). La Historia de España es esto (entre otras cosas):
Covadonga y El Escorial. España es un país viejo, aunque poblado por adolescentes analfabetos “functio…. tal y tal…”. Uno de los grandes logros de la transición es haber mantenido los símbolos seculares de esta vieja nación: bandera, himno y monarquía. Es una prueba que evidencia que no todo ha empezado con el “Lenin español” o con el morritos de Sevilla.