Ay coshito, pobrecito! Así estaba el mío hasta que aprendió con los higaditos horneados.
Ay coshito, pobrecito! Así estaba el mío hasta que aprendió con los higaditos horneados.
Es lindo que atrape cosas como el frisbee, la pelota, las galletas, etc.
El mío no obedece en cuanto a sus necesidades fisiológicas pero sabe las instrucciones de entrar, salir, sentarse, comer, no comer. Y tampoco obedece al cállate por favor que no dejas oír sólo cuando pasan sus vecinos los gatos.
documental que sorprendió a los críticos en cannes.
Tan linda mujer y tan lindo su canto, tristemente una presa más de las drogas.
Ya lo quiero ver.
Ay no!!!! Me da el patatus, me da, me da! Jajaja
Esto es un circo, un circo triste y decadente, a dónde vamos a parar?
Le voy a pedir una doble a mi jefe.