-He aprendido a no intentar convencer a nadie. El trabajo de convencer es una falta de respeto; es un intento de colonización del otro. (Saramago)
No pretendo cambiar el mundo pero en el pedacito que me tocò pretendo hacer la diferencia..Amé, fui amado, el sol acarició mi faz.
¡Vida, nada me debes! ¡Vida, estamos en paz!
En Costa Rica tiene dos acepciones: la primera, el adicto al alcohol; la segunda, repostería como la de la bandeja de la imagen:
Mi pena es sencilla y nada misteriosa y, como tu alegría, por cualquier cosa estalla.