Todos somos santos cuando hablamos de los pecados ajenos.
No sirve explicar,
Todos somos santos cuando hablamos de los pecados ajenos.
No sirve explicar,
-He aprendido a no intentar convencer a nadie. El trabajo de convencer es una falta de respeto; es un intento de colonización del otro. (Saramago)
No pretendo cambiar el mundo pero en el pedacito que me tocò pretendo hacer la diferencia..Amé, fui amado, el sol acarició mi faz.
¡Vida, nada me debes! ¡Vida, estamos en paz!
-
Uno muy mexicano y sin ofender a nadie:
"No hay cabrón sin pendejo"
tic-tac-tic-tac....
Se explica solito...
---
No me tientes que si nos tentamos no nos podremos olvidar... Benedetti
***