Desdoblamiento Espiritual, (Viaje Astral).

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OTROS CASOS DE DESDOBLAMIENTOS POR ANESTÈSICOS

Una interesante experiencia la tuvo George Wyld que la narra en su libro: LA TEOSOFÌA O LA DINÀMICA DEL ESPÌRITU.

1.- El señor Wyld habìa estado aspirando cloroformo mara mitigar el dolor que le producìa un càlculo renal. Metido en su cama con pijamas, sorpresivamente se encontrò vestido, con su mente lùcida y sin sentir ningùn dolor del mal que lo aquejaba, a dos metros de distancia de la cama, observando su propio cuerpo fìsico totalmente inmóvil.

Pasada esta experiencia, consultò con otras personas que habìan pasado por lo mismo, y todas concordaron en que al momento de la proyecciòn espiritual, los dolores que aquejaban al cuerpo fìsico, no los sentìan en su cuerpo espiritual.

2.- J. Arthur Hill, en su obra: EL HOMBRE ES ESPÌRITU, narra el caso de una señorita de apellido Hinton que cuando tenìa 17 años fue cloroformada para extraerle una muela.
Se demorò mucho màs tiempo en despertar que lo acostumbrado y ya tanto el odontòlogo como quien la llevò para hacerse la extracción estaban sumamente alarmados.

Cuando por fin despertò del sueño anestèsico, dijo haber estado arriba, casi en el techo del aposento. Que vio su cuerpo en la silla del dentista, y que les hablò insistentemente a todos los que allì estaban. Al ver que nadie le contestaba, pensò que habìa muerto, y como buena religiosa que era, pensò tambièn que alguien iba a venir a juzgarla y esperò. En esa espera estaba cuando sùbitamente despertò.

3.- H. Ernest Hunt, en su libro: POR QUÈ SOBREVIVIMOS, escribe sobre el caso de una amiga que una noche, creyendo que estaba soñando, se encontrò en la terraza del edificio en donde vivìa. Observò una cuerda delgada que ella creyò que era la cuerda que ella mismo habìa instalado para secar la ropa.
Extrañada observò que la cuerda se metìa por una ventana y decidiò seguir la cuerda para ver por què estaba dentro de esa habitación. Al llegar, observò que la cuerda terminaba e la frente de un cuerpo que estaba en la cama. Al acercarse, e identificar el cuerpo como el de ella, se produjo el retorno sùbito a la vigilia.

Algunas personas que se desdoblan concientemente, recalcan que muchos lo podrìan hacer, pero que es importante que las personas que practican para lograrlo, no tengan la màs mìnima intenciòn de utilizar negativamente el desdoblamiento para dedicarse a actividades nada edificantes; como para obtener provechos materiales posteriores, o incluso espirituales pero desviados, o en contra de la moral y de las buenas costumbres

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¿CUÀNTO PESA EL CUERPO ESPIRITUAL O “CUERPO ASTRAL”?

Desde hace mucho tiempo, esta ha sido la preocupación, y posterior investigación para saber el peso del alma, que equivaldrìa al peso de la entidad espiritual del que se desdobla.
A resultados obtenidos en este aspecto, los negadores compulsivos de todo, han dicho que ese peso dado por los cientìficos que lo han logrado, no es tal peso del alma sino una serie de humores y gases que pierde el cuerpo después de muerto.

El asunto es que el peso del alma o cuerpo espiritual, o cuerpo astral, ha sido medido justo en el momento de la muerte, y nada que ver con posteriores pèrdidas de humores, y menos de gases, ya que el gas en el organismo, igual que cualquier otro gas, no tiene peso, a no ser que se lo licùe o se lo solidifique.

Muchas personas creen que el alma no debe pesar nada, pero Andrès Jackson Davis, un mèdium de la dècada de los 1.840, llegò a decir que el cuerpo espiritual pesaba una onza, (28.3 gramos), pero si lo dijo èl que era mèdium, no fue seguro por investigaciones serias sino porque se lo dijo un espìritu, y nadie, ningùn cientìfico serio va a tomar como verdad lo que diga un espìritu.

Hace unos cuantos años, los fìsicos holandeses, doctores Malta y Zaalberg Van Zelts, decidieron investigar en este sentido e idearon una serie de complejos aparatos para este fin.
Despuès de unas cuantas investigaciones, determinaron que el peso del cuerpo espiritual, o astral, o alma, era de 69,5 gramos.

Este resultado concuerda con los experimentos llevados a cabo por el doctor Duncan McDugall, de Haverhill, Mass., USA.
Los experimentos de McDugall consistieron en pesar a un nùmero de pacientes al momento de morir.

Al paciente se lo acostaba en una balanza de precisiòn, acostado con la ropa que tenìa, y poniendo la balanza en cero a fin de obtener el peso neto de la entidad que salìa del cuero al momento de morir. Al producirse la muerte, la balanza marcaba la pèrdida de peso del cuerpo, y no era precisamente porque el “ùltimo suspiro” era el que pesaba.

El peso perdido, en cuatro de seis casos con los que se experimentaron, (66,66%), fue entre 65 y 70 gramos, constituyendo asì, la confirmaciòn del peso obtenido en Holanda por los doctores Van Zelts, años atràs.
Esto tambièn demostraba que el cuerpo espiritual, por muy sutil que sea, tiene un peso especìfico.

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EN ALGUNA OPORTUNIDAD………

A muchas personas les he escuchado decir: ¡Jamàs he tenido un desdoblamiento! Pero, ¿no serà que lo tuvieron y lo confundieron con un sueño? ¿Sòlo por desconocimiento de que el fenòmeno existe?

La ùnica experiencia que recuerda mi hijo menor es la siguiente: Tenìa 10 años y caminando con la madre por el centro de la ciudad, se adelantò a ella a cruzar la calle pero mirando al lado equivocado del flujo del tràfico. Fue impactado por una camioneta de esas que llaman pick up, y al caer al pavimento, se viò a sì mismo debajo de la camineta que le habìa pasado el neumàtico delantero por una pierna.

Contàndome en el hospital sobre el asunto me dijo, papà: Fueron sòlo segundos pero me vi tendido en la calle, y la forma en que hacìa la descripción coincidìa con lo que habìa visto su madre. En el accidente no se golpeò la cabeza, ni por el impacto con el vehìculo ni al caer al pavimento. El conductor del vehìculo, tuvo tiempo a frenar, pero no lo suficiente y eso hizo que el impacto no fuera tan fuerte. Quizàs fue el impacto emocional lo que le provocò la fugaz proyecciòn.

Nunca màs ha tenido un desdoblamiento. Por cierto, le hago bromas con el asunto, y cuando me dice que quisiera tener màs experiencias de desdoblamiento, le digo: ¡Es fácil! Andà y cruzà la calle con la boca abierta como en ese dìa.

En lo que a mì respecta, y a pesar que he experimentado tanto con personas que tienen la facilidad de proyectarse con conciencia, sòlo he tenido dos experiencias durante toda mi vida.
La primera de ellas, no pogresò porque fue una catalepsia astral. Tenìa 7 años y habiendo regresado de la escuela, me quitè los zapatos y me acostè en la cama con ropa y todo. Me puse de medio lado en el filo de la cama, mirando al piso de la habitación, y me quedè dormido.
No sè cuanto tiempo estarìa dormido, pero aùn en la misma posición en que me acomodè, abrì los ojos y sentados en el piso del cuerto, estaban dos niños a quienes yo no conocìa. Estaban absortos jugando los dos , no me acuerdo, o no vi si era con naipes. Tratè de hablarles, pero como en todos los estados catalèpticos causados por un desdoblamiento imperfecto, no me salìa la voz, es màs, no podìa mover los labios, y tampocco podìa mover el cuerpo porque estaba engarrotado. Asì estuve varios minutos hasta que me volvì a quedar dormido. Al despertar, a pesar de la corta edad que tenìa no lo tomè como un sueño sino como algo que realmente me habìa sucedido.
Seguramente los niños eran espìritus que estaban en el cuarto pero como no era, ni soy vidente, sòlo los pude ver al desdoblarme, aunque imperfectamente, sì los pude ver.

La segunda experiencia si fue un desdoblamiento espontàneo, (no buscado), pero conciente.
Habìa estado en Brasil de paseo, y regresaba en bus desde Puerto Alegre, Rìo Grande Do Sul, Brasil, a Montevideo, Uruguay.
Tenìa una hermana mayor con problemas de diabetes, y estaba tan mal que ya necesitaba dos diálisis semanales a causa del problema.
Como era un viaje nocturno me habìa quedado dormido, y de repente me encontrè al lado de mi hermana, pero me extrañò verla de buen semblante cuando antes de salir de viaje la habìa visitado y salì todo deprimido de ver su estado fìsico y emocional.

La besè de saludo y me dijo: Estoy toda extrañada. ¿Por què està llorando toda la gente?
Yo no me habìa dado cuenta hasta el momento, pero cuando girè para mirar al punto que ella miraba, reconocì su casa. Estàbamos en casa de ella. Seguì mirando y vi el ataùd en donde estaba ella. Vi a sus hijos, a su esposo y a vecinos y amigos que efectivamnte estaban llorando. Al saber que ella habìa muerto, pero que aùn ella no lo sabìa, aprovechè para prepararla y para que no tuviera una penosa turbación.

Le dije; Estàn llorando por ti. ¿Por mì? Yo estoy enferma pero no he muerto. ¿No?, le dije.
Acèrcate y mira quièn està dentro del ataud. Ella se acercò y volvió toda desconcertada diciento: Se parece a mì. No se parece, le dije. Eres tù y te estàn velando, y por eso es que lloran. La vi que entristeciò, y yo aprovechè para seguir ayudàndola.
Le dije: Quiero que aceptes tu muerte y que no vayas a quedarte en la casa ni vayas a andar por allì creyendo que aùn vives. Te voy a dejar con una persona y quiero que lo que te tenga que decir lo escuches y que hagas lo que te pida que hagas.

Al terminar de decirle eso, despertè, y me dije: Muriò mi hermana. Mirè la hora que era y al llegar, por supuesto, me dieron la noticia de su muerte. Cuando hablè con mi sobrina le preguntè, esta madrugada, a las 3 horas, ¿que estaba sucediendo en la casa? Nada especial tìo. A esa hora la estàbamos velando porque la ibamos a enterrar entre las ocho y las diez horas.

Confiè en que a mi hermana se la llevaron de su casa y asì pudo evitàrsele el trauma de ver su propio entierro.


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¿QUÈ HACEMOS CUANDO NOS DESDOBLAMOS? I

Las tareas que se imponen los que se desdoblan concientemente, o que tienen el desdoblamiento natural cuando dormimos, sin conciencia al despertar, obedecen a la calidad espiritual de cada uno de nosotros. Para hacer una comparación dràstica para que se entienda bien, el borracho consuetudinario no se va a meter dentro de una Iglesia a rezar, ni la beata consuetudinaria se va a meter en un Bar. Cada cual en lo suyo. Cada cual con su calidad espiritual que termina hacièndose una costumbre, tanto en vigilia como durante el desdoblamiento nocturno.

Primero que todo, hay que tener plena aceptación de que estamos desdoblados, y digo esto porque muchos han dado por llamar al desdoblamiento “una turbación menor”. Aceptarìa este tèrmino si todos los que estàn desdoblados no saben que lo estàn, y hasta pueden creer que han muerto. ¡Pero no es asì! No todos los espìritus desencarnados estàn turbados en el espacio. Asì tampoco, no todos los desdoblados ignoran su estado. La mayorìa de ellos saben sobre su desdoblamiento, que insisto, aunque no tengan conciencia al despertar de lo que hicieron desdoblados, ellos cumplen con una actividad en ese estado.

¿Què hacen los que no saben que estàn desdoblados? De èstos sì se podrìa decir que tienen una pequeña turbación. ¿Por qué? Porque al desdoblarse, no saben lo que les està sucediendo. Al salir del cuerpo, se encuentran con gente dentro de su cuarto que no esperaban encontrar. Si es casado y su esposa duerme al lado de èl, el que la esposa se desdoble, no quiere decir que va a estar esperando el cuerpo espiritual de su esposo para seguir juntos en el espacio en una aventura de desdoblamiento. ¡Nada que ver! La esposa es libre espiritualmente, y ella espiritualmente va a ir donde quiere, y si no quiere ir con su marido, no va con su marido. Puede que se den casos de perfecta afinidad, y que lo hagan, pero no es una regla.

¡Bueno! La reacciòn directa del turbado es despertar a su esposa, para que lo saque de la confusión que tiene. Pero cuando le pone la mano en el hombro para despertarla, ve como su mano traspasa el hombro del cuerpo de su esposa y eso lo turba. No contento con eso quiere despertarla a gritos, lo hace, pero lo turba el que la voz no le sale. Va a otra habitación donde duerme otro familiar, repite la operación y lo turba el negativo resultado.
Si no contento con eso, piensa en algùn amigo a quien consultarle, instantáneamente se encuentra en casa del amigo, en su dormitorio, durmiento con su esposa porque tambièn es casado. Delicadamente le va a tocar el hombro para no despertar a la esposa del amigo y lo turba ver que le sucede los mismo: Su mano atraviesa el cuerpo del amigo. Lo hace con la esposa e igual, y eso lo turba. Les grita pero cero voz, y eso tambièn lo turba. ¿Se dan cuenta?

De repente, algùn espìritu que ande por allì y vea el afàn del desdoblado, lo entera de lo que està pasando y pierda esa turbación y empiece a tener una actividad normal de desdoblado, inconciente tal vez, pero ya sabe que està desdoblado y se abre un nuevo mundo para èl que lo puede llevar a una actividad de rutina o a una actividad de conocimientos, según su estado espiritual.

Otro, u otros desdoblados que no saben que lo estàn, sino que piensan que estàn en vigilia,
Tratan de tener actividades materiales, y al hacerlo, tambièn se turban de ver que no logran con su cometido. Las cosas que normal y rutinariamente hacen, no las pueden hacer ahora.

El borrachito que recièn se acostò a dormir con una curda de Padre y Señor mìo, se encuentra con que no tiene resaca, (¡claro!, es el cuerpo el afectado por la “vinorrea”), llega al Bar, se sienta en una mesa, pero la linda mesera que lo atiente siempre y le deja poner la mano en sus nalgas, quizàs agradecida por la buena propina que deja, pasa por su lado y ni lo mira a pesar de que èl, cuando ella pasa le brinda la mejor de sus sonrisas. El piensa: Està brava. ¿Què le hice? Recuerdo que anoche le dejè propina. Pasa la mesera de nuevo y el le dice: ¡Mira! Pero nada, ella sigue de largo. ¡Dios! Sì que està brava, piensa. Voy a tener que dejarle una mayor propina.
Cansado de la “indiferencia” de la mesera, se levanta de la silla y se dirige a la barra a pedir un vino. Cuando llega a la barra, el barman tambièn lo ignora, como si no estuviera allì. Igual, le llama la atención pero la voz no le sale. Hay una botella de vino destapada en la barra, junto a un vaso, trata de tomar la botella y nada. Trata de tomar el vaso y nada. Su mano traspasa la botella y el vaso. Ve a todos los asistentes al Bar disfrutando de sus bebidas y èl no lo puede hacer. Toda esa serie de cosas lo turban, y es porque no sabe que està desdoblado. Quizàs repita lo mismo noche tras noche hasta que finalmente de alguna manera se entere de que està desdoblado. Ya terminada esa “pequeña turbación”, las pròximas veces que se desdoble, ¿què harà?. ¡Vaya usted a saber! A lo mejor vuelve al mismo sitio, quizàs conciente de que ya no pueda beber en ese estado espiritual, pero ese es su ambiente, y se sentirà felìz allì.

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¿QUÈ HACEMOS CUANDO NOS DESDOBLAMOS? II

Conciente o no conciente de su desdoblamiento, turbado o no turbado durante su desdoblamiento, nadie mejora su calidad espiritual por el solo hecho de desdoblarse. Cada uno sigue con sus buenas, o malas costumbres, con sus hàbitos positivos o negativos, y con sus tendencias, positivas o negativas.

Digo esto porque he observado en algunos velorios que el difunto, por el hecho de pasar a otra vida, en horas solamente, ya nadie se acuerda de la porquerìa de calidad humana que tenìa.
Los hijos dicen: ¡Hay! Tan buen padre que era. Y todos los asistentes compulsivos a los velorios, sonrìen maliciosamente porque saben que fue un pèsimo padre.
La ex esposa, grita ridículamente al pie de la caja morturia en donde “descansa” el que se fue: ¡Querido! Yo sè que nunca me engañaste ni con el pensamiento. Risa difícil de contener de los asistentes, pero que ayudan a contenerla con un ataque de tos colectivo. Todos ellos saben que a la esposa ya no le queda espacio para un cuerno màs. ¡En fin!

Continuando con su calidad humana, el desdoblado sigue siendo el mismo del que descansa en la cama, porque el que descansa en la cama es animado por el que està fuera de la cama: El cuerpo espiritual. En èl es que està el espìritu, atrasado o progresado.

Como ya vimos anteriormente un caso de imperfección espiritual, veamos otro, que aunque no necesariamente es de perfecciòn espiritual, el lo que acostumbra, cree que sì.

Una beata consuetudinaria, pero que no sabe que està desdoblada, (turbada), sin mirar la hora siquiera, sale de su casa y se dirige a la Iglesia. ¡Por supuesto! Va a encontrar las puertas de la Iglesia cerradas. Como està turbada, piensa: ¡Ay! Me vine muy temprano. Quisiera estar adentro. No termina de pensarlo, cuando se encuentra, para mayor turbación suya, dentro de la Iglesia. No se lo explica pero, ya està adentro. La primera actitud es mojar los dedos en la pila de “agua bendita” para persignarse. Se turba cuando observa que los dedos salieron secos de la pila. Mete màs los dedos y observa. Estàn dentro del agua pero al sacarlos salen secos. ¿Què pasarà? Pero igual se persigna en medio del pasillo, en genuflexión, y se sienta a rezar.

Lo màs seguro es que en la iglesia se encuentren otras beatas desdobladas, concientes o no de su desdoblamiento, o turbadas o no durante su desdoblamiento. Como dije: La gran mayorìa de los desdoblados en las condiciones que termino de detallar, continúan con sus cotidianidades, y las cotidianidades de las beatas es vivir prácticamente dentro de las Iglesias.

Ellas rezan. Como no han podido llevarlo porque es material, ellas pueden crear un rosario ideoplàstico y ponerse a rezar el rosario. Como la beata que nos ocupa està turbada, y cree que està en la Iglesia con su cuerpo fìsico y no con su cuerpo espiritual, terminados sus rezos o la cantidad de rosarios que acostumbra, se levanta y quiere prender una vela, y se turba al ver que no puede tomar con la mano el palillo para encenderla . Por màs que lo intenta no puede. No se explica lo que le està sucediendo y piensa: Cada dìa de por medio me sucede lo mismo. El dìa “de por medio” es el descanso de la noche. Lo piensa porque cuando va a la Iglesia en vigilia todo es normal. Y cuando va està desdoblada es que tiene esas experiencias que la turban. Cuando va desdoblada por la costumbre de ir, es cuando la turban estas cosas, por eso ella cree que es un dìa sì y otro no, alternados.

Pero las beatas que saben que estàn desdobladas, esa es su actividad. Su actividad en vigilia y su actividad con el cuerpo espiritual proyectado. No tiene nada màs que hacer. Ella cree que con esa actividad, se prepara para “el reino de Dios”. No importa que al salir del templo se encuentre con otra beata a y empiece a rajar de las otras beatas que estaban en la Iglesia.
¿Te fijaste en el velo de Rosa? ¡Todo roto querida! ¿Es que la vaga esa no tiene tiempo para coserlo? Deberìa hacerlo en lugar de estar asomada en la ventana todo el dìa para criticar a todo el que pasa por su casa.

¿Y la Margarita? ¿Te diste cuenta de los golpes de pecho que se daba? ¿A quièn engaña? Todo el mundo sabe que se acuesta con el carnicero.

¡Ah! Pero el colmo es la Patricia. Ella vive en el confesionario, y me pregunto: ¿Le contarà todo al cura? Porque si se lo cuenta todo, por eso es que va al confesionario todos los dìas, porque uno solo no le alcanza para contar sus “pecados”, ¡que son!....¡ni te cuento!

¡En fin! Asì per sècula. No es improbable que junto a las desdobladas concientes o no, turbadas o no, tambièn se encuentren muchas desencarnadas, turbadas, eso sì, porque si no lo estàn, ya saben que esa costumbre de vivir dentro de la Iglesia no le sirvió de nada.
Que la ùnica manera de progresar espiritualmente es en el templo del vivir. ¡Y del buen vivir!

Pròximo escrito en este mismo tema: ¿QUÈ HACEMOS CUANDO NOS DESDOBLAMOS? III

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¿QUÈ HACEMOS CUANDO NOS DESDOBLAMOS? III

Vistos ya dos aspectos negativos de còmo “aprovechan” algunos sus desdoblamientos, veamos uno positivo; y esto no quiere decir que el desdoblamiento en sì sea positivo o negativo. ¡Para nada! Los positivos o negativos son los desdoblados, jamàs el desdoblamiento.

Hay en este valle de làgrimas personas con mucho interès en saber. Los que ya saben, tambièn tienen mucho interès en ampliar esos conocimientos, por lo tanto, al desdoblarse aunque no sea concientemente, y saber que estàn desdoblados y no turbados, aprovechan para aprender o para ampliar conocimientos sobre lo ya aprendido.

Muchos de èstos, sin tener la menor idea en vigilia de lo que haràn cuando se desdoblen, e incluso personas que no creen que el desdoblamiento espiritual sea posible, antes de volver a su cuerpo en la madrugada, ya han hecho planes para las tareas intelectuales del pròximo desdoblamiento.

El aficionado a la literatura, que por fìn tenìa la oportunidad de leer la obra Tal en la Biblioteca Tal, de Tal o Cual paìs, y que la habìa localizado, se propone su lectura en la siguiente emancipación del espìritu.

Y asì lo hace. A la noche siguiente acude a la Biblioteca, y aunque el libro estè ordenadamente puesto en los anaqueles en medio de otros libros, esto no es impedimento para que el espìritu que es todo visiòn, penetre en las carátulas de los libros hasta llegar, sin tener que mover el libro para una mesa porque su mano no es material, y sin tener que ir pasando pàgina por pàgina ya que sus dedos no son materiales, y gracias a Dios porque asì no va a tener que baborrearlos para pasar pàginas, la selección de las pàginas las hace mentalmente y asì tiene acceso a la pàgina elegida. Su asimilación a la lectura es velòz, por lo tanto, el libro, por màs voluminoso que sea puede ser leìdo en horas. Tampoco hay impedimento en el idioma en el que està escrito el libro. El que lo lee lo va a entender. !Por supuesto! Eso si el libro que le interesa sòlo està editado en otro idioma, ya que lo natural es que el interesado busque ediciones del libro que le interesa que sean en el idioma que èl habla y escribe en esta vida.

¿Còmo se puede leer en un idioma desconocido? Una persona que lo hizo, y que tiene toda mi credibilidad, al preguntarme còmo habìa leìdo un libro en otro idioma, le dije que lo ùnico que se me ocurrìa, es que su espìritu guìa haya leìdo el libro junto con èl, y telepáticamente, a medida que lo leìa, le trasmitìa la lectura a su guiado.

Tambièn se puede dar el caso que algunos mìsticos, o espiritualistas no mìsticos, quieran leer cierto texto tibetano, y pueden hacerlo por el mismo mecanismo, asì estos textos estèn escritos en rollos en vez de libros. Igual va a poder entenderlos por el mismo mecanismo o participación del guia ante el desconocimiento de la escritura de los textos.

El inquieto religioso. No porque estè conforme precisamente con lo que las religiones digan sobre tal o cual cosa, o sobre tal o cual documento sino que lo inquiete la investigación sobre los Evangelios, y quisiera saber si lo que dicen estos tal como lo leemos en nuestros dìas obedece a la realidad, quiere y puede entrar a la biblioteca secreta del Vaticano que se dice que està en sòtanos y bien resguardada de los ojos indiscretos y ajenos a la direcciòn religiosa.
Al consultar esos documentos originales vea que coinciden o no con los publicados, logra la satisfacción de sus sospechas, o la decepciòn de que sus sospechas fueron infundadas.

Pero…..¡y esto es muy importante! Esto, por muy actividad edificante que sea dentro del desdoblamiento, no quiere decir que al despertar lo recordaremos todo.
¡Incluso!, una persona que se desdoble concientemente, podrà recordar ciertas cosas, pero otras no las recordarà porque està siendo protegido de una eventual acciòn de hacer el ridìculo.
¿Se imaginan la burla que podrìan hacerle a una persona en prensa, radio y televisión si llega a decir que èl estuvo en la biblioteca secreta del Vaticano, que entrò allì desdoblado y que leyò tal o cual Evangelio original y que coincidìa o no, con el que figuraba en la Biblia actual?

Tampoco podrìa decir sin caer en el ridìculo: ¡Los Evangelios que figuran en las Biblias actuales, dicen la verdad porque yo desdoblado entrè a la biblioteca secreta del Vaticano y lo verifiquè!

O sea, que por muy concientes que seamos de nuestra actividad espiritual durante el desdoblamiento, eso no quiere decir “que olvidemos”, o quizàs “nos hagan olvidar” ciertas cosas que pueden convertirse en perjuicio para nosotros.

Pròximo escrito en este mismo tema: ¿QUÈ HACEMOS CUANDO NOS DESDOBLAMOS? IV

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¿QUÈ HACEMOS CUANDO NOS DESDOBLAMOS? IV


Seguimos con la rutina de los desdoblamientos concientes o no, y en los que haya turbación o no.

Durante el descanso del cuerpo, la persona sociable no pierde esa caracterìstica de su individualidad espiritual. Al que le gusta hacer visitas, las sigue haciendo. ¡Claro! Si es la hora de dormir para mucha gente, es probable que cuando vaya a visitar a alguien no se encuentre en su casa, espiritualmente hablando, porque como èl, al desdoblarse se alejò para hacer lo que mejor querìa.

Pero no encontrar a alguien que iba a visitar, no es nada para èl y busca hacer otra visita. Y cuando llega hasta donde el amigo o pariente selecciònado, el problema va a estar sòlo si èl se encuentra turbado, o sea que cree que està en vigilia, o si està conciente de que està desdoblado.

Si cree que està en vigilia, (turbado), al encontrarse en la casa del amigo o pariente, sì el visitado està despierto, va el desdoblado a empezar a turbarse al notar que al saludar al amigo o pariente, èste ni se da por enterado. Empiezan las normales actitudes en estos casos, a hablar en voz alta al visitado, y hasta gritarle si ve que aùn no le oye. Luego la turbación de llegar al toque para enterarlo de su visita ya que aparentemente el visitado no lo escucha. Pero el toque corporal, es inútil tambièn.

Muy diferente, a pesar de que no sepa que està desdoblado sino en vigilia, si encuentra al amigo, ya desdoblado por el descanso corporal, y la visita transcurre normalmente. Puede ser que los dos, visitante y visitado crean que estàn en vigilia, (turbados), pero se puede presentar el caso de que el visitado sì estè conciente de que està desdoblado, lo cual serìa beneficioso para el visitante ya que serìa enterado por el visitado de su estado de desdoblamiento y lo comprendiera y asimilara. ¡Bueno! Por lo menos esa noche.

Diferente serìa que tanto visitante como visitado estèn concientes de que estàn desdoblados y puedan tener una actividad conjunta, y eso, si entre los dos existe afinidad entre gustos, actitudes y entretenimientos.

El sociable turbado o conciente de su desdoblamiento puede hacer tantas visitas como el tiempo le alcance durante la noche. Visitas sociables, visitas a parientes y amigos enfermos, visitas personales de pèsames por pèrdida de seres queridos de los parientes y amigos que visita.

Cuando no se tiene conciencia plena de la actividad durante el desdoblamiento, no es nada extraño que cuando despertemos, tanto los sueños normales, como ráfagas de conciencia de la actividad espiritual vengan mezclados y creamos que todo lo que recordamos hayan sido sueños.
Tratar de separar unos de otros en estas circunstancias, es imposible, a no ser repito, que se tenga plena conciencia del desdoblamiento, ya que esto nos pondrìa a hacer una certera clasificaciòn de la actividad espiritual y de los sueños, ¡claro!, siempre y cuando hayamos tenido sueños esa noche. No es obligatorio que tengamos sueños. Hay veces los tenemos y en ocasiones no soñamos nada. ¡Bueno! A no ser que hayamos olvidado lo que soñamos. Si efectivamente fueron sueños.

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TURBACIÒN DURANTE EL DESDOBLAMIENTO

Recordamos lo que significa la palabra “turbación”: CONFUSIÒN-DESCONCIERTO.
Esto es precisamente por lo que pasa un espìritu desencarnado, y en este caso desdoblado tambièn, cuando cobra conciencia en el espacio y continùa creyendo ser un viviente el primero, y el segundo de que està en vigilia. Se confunde, se desconcierta, se turba, al darse cuenta de que no puede manejar o manipular nada material, que no puede ser escuchado o ser visto por los vivientes a los que ellos se dirigen.

El desdoblado natural, o sea el que lo hace todas las noches durante el descanso del cuerpo, bajo estas condiciones de turbación no puede aprovechar las facilidades que tiene para hacer todas las cosas que quisiera hacer en vigilia. Lo que hace es permanecer anclado, muchas veces sin siquiera salir del hogar, al igual que cualquier desencarnado que pase por esa turbación.

¿Còmo hacer para que esto no suceda y se pierda esa turbación, o no caer en ella al momento del desdoblamiento?
¡Eso si que es difícil! ¿Por què? Por lo siguiente: Los espiritistas nos preparamos, o deberìamos hacerlo, para no caer en turbación cuando desencarnamos. Yo por ejemplo, un dìa limpiando un tanque de agua, me rodò la escalera en el momento de bajarme de la plataforma que estaba a 6 metros del piso, y eso por el apuro de separar a dos de mis perros que estaban peleando. Quise bajar porque estaba solo en la casa.
Durante la rodada sentì tres impactos sobre mi humanidad. El ùltimo fue en la cabeza al estrellarme contra un muro de la casa.
Quedè boca arriba, totalmente horizontal. No quise moverme y me quedè quieto. No sabìa si me habìa fracturado algo. En ese momento pensè: ¿Habrè desencarnado? Si desencarnè, me decìa, no voy a caer en turbación. Si no podrè hacer algunas cosas cuando me yerga, es porque desencarnè, y voy a aceptar mi estado espiritual.

En esa meditaciòn me encontraba, cuando sentì la lengua de mi perro Ronald en mi cara. ¡Me alegrè! ¡No habìa desencarnado! Pero el cuerpo me quedò todo adolorìdo por dìas, y con un chichòn como una taza invertida en la parte posterior de mi cabeza. ¡No tuve fracturas!

Pero he traìdo este caso porque no todos los espiritistas hacen lo mismo a pesar de que saben que en cualquier momento podemos desencarnar.
Yo frecuentaba ocasionalmente un Centro Espiritista cuando me invitaban a dar una charla. Tenìa buenas relaciones con ellos. En la Junta Directiva del Centro, habìa un señor muy activo y entusiasta. Lo llamarè Fulano. ¡Bien! Fulano desencarnò de un ataque al corazón.
Pasaron 4 años, y una noche durante una sesiòn, oyeron al espìritu que decìa: Hermanos, ¿què les sucede conmigo? ¿Què fue lo que hice o dije para que nadie me dirija la palabra y me ignore por completo? Y por allì se fue.
Fulano habìa desencarnado hacìa 4 años, siendo espiritista, con todos los conocimientos que un espiritista tiene de lo que sucede después de la muerte, y estaba en turbación 4 años después de su muerte fìsica.

Por eso digo que tambièn es difícil que un desdoblado no se turbe durante esa emancipación del espìritu.
Y si el desdoblado es una de esas personas que dice que el desdoblamiento espiritual son pamplinas, que eso no es posible, que lo que tenemos son sueños y ninguna actividad espiritual, menos que menos va a emanciparse sabiendo que lo està haciendo. Lo harà turbado.

Las personas que aceptan el desdoblamiento y quisieran tener conciencia de lo que hace en ese estado, pero no la tiene, antes de dormir, o de hacer una pràctica de desdoblamiento, deberìa decirse a sì mismo que si llega a desdoblarse, asì no tenga conciencia de ello, que no caerà en turbación. Que èl quiere tener una actividad normal en ese estado, la recuerde o no la recuerde al despertar.

Pròximo escrito en este mismo tema: DESDOBLAMIENTOS CONCIENTES EXPERIMENTALES.

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DESDOBLAMIENTOS CONCIENTES EXPERIMENTALES

El màs notable de los que se desdoblaban concientemente, Sylvan Muldoon, le gustaba hacer experimentaciones mientras estaba desdoblado.
Durante un desdoblamiento conciente se propuso investigar algo que le habìa llamado la atención. Durante algunos desdoblamientos, se viò repentinamente separado del ambiente en donde se encontraba y volver al cuerpo fìosico, sin haberlo querido èl.
Descubriò al volver a la vigilia, que el regreso violento habìa obedecido en cada una de esas oportunidades, a ruidos que su oìdo habìa recogido y que habìan sido captados por el cuerpo espiritual a travès del cordòn. En otras porque habìa quedado su cuerpo mal acomodado y en un momento dado empezó a sentir dolor, por ejemplo, en su brazo porque este habìa quedado aprisionado bajo su cuerpo. En otras todavía, y esto es notable, que el antiguo reloj de pie que estaba en su dormitorio se parò de repente porque se le habìa olvidado darle cuerda, y al cesar el tic tac al que estaba acostumbrado y de repente hacerse el silencio en su cuarto, ese cambio le hizo volver abruptamente.

¡Pues bien! Una noche decidiò experimentar para averiguar si una vez fuera del cuerpo, su espìritu era capaz de detenerlo afuera de èste, y no sincronizar dentro de èl, al darse cuenta que lo que lo habìa hecho retornar violentamente, no era alarmante y podìa volver al sitio de donde fue separado.

Desde un punto lejano decidiò volver a donde estaba su cuerpo, y de repente se encontrò en la posición normal del cuerpo espiritual sobre el cuerpo fìsico hasta cobrar conciencia de que estaba afuera.
Entonces decidiò acortar la distancia entre el cuerpo espiritual y el fìsico, hacièndolo poco a poco. Llegò un momento en que ya no lo pudo detener màs y el cuerpo espiritual fue atraìdo a su cuerpo fìsico como al accionar un potente imàn.
Esto lo probò una y otra vez, y fue lo mismo. Llegò a la conclusión de que el cuerpo espiritual sòlo puede estar fuera del cuerpo fìsico hasta cierta distancia. Si se acercan demasiado los dos cuerpos se produce la sincronizaciòn automàtica que el sujeto no puede controlar ni anular.

Otra experiencia que tuvo en esos intentos, fue la siguiente: En una mesa que estaba en el pasillo en donde estaba la puerta de entrada de su dormitorio, habìa un metrònomo que lo usaban en las clases de mùsica de los de la casa.
Una noche quiso averiguar hasta què punto èl podrìa accionar el metrònomo. Probò con su dedo espiritual moviendo el pèndulo del metrònomo e inmediatamente sincronizò en su cuerpo. Enseguida escuchò el vaivèn del pèndulo del metrònomo. ¡Lo habìa hecho funcionar! Y no parò de hacerlo hasta que se le terminò la cuerda.

El clasificò este hecho como algo inexplicable en sus aventuras de desdoblamiento conciente. Eso tiene una explicación. Ningùn cuerpo espiritual puede accionar nada material a no ser que haya una materializaciòn del cuerpo espiritual, que puede ser total o parcial. Todo espìritu desdoblado puede al igual que uno desencarnado, materializar parcial o totalmente siempre y cuando tenga cerca una fuente ectoplasmàtica. Y Muldoon, aunque èl no lo supiera, era su propia fuente ectoplasmàtica.
Y la prueba de eso, es que cuando Muldoon era niño, y de esto ya hablè con anterioridad en un escrito de este mismo tema, una noche cayò en una crisis de salud. Querìa que su madre viniera para atenderlo, pero ella en su dormitorio, no escuchaba la voz del niño Sylvan que la llamaba. El, desdoblado, llegò hasta el cuarto de su madre, ella dormìa y por màs que èl la llamaba, por supuesto, la madre no podìa escucharlo.

Entonces, cuenta Muldoon, que tomò el filo del colchòn y lo alzò, haciendo rodar a la madre al piso. Cuando ella se repuso del asombro, dijo: ¡Sylvan!, y corriò desesperadamente a atender al niño que la necesitaba.
Si Sylvan no hubiese sido la fuente ectoplasmàtica no hubiese podido materializar sus manos para voltear el colchòn.
Se podrìan preguntar: ¿Y no serìa la madre? No, porque cuando el fenòmeno de accionar el pèndulo, Sylvan se encontraba solo en su casa.

Sin embrago èl clasificò esas dos aventuras como cosas inexplicables en su vida de desdoblamientos concientes, cuando en realidad habìa una explicación.

Pròximo escrito en este mismo tema: ENCUENTROS INESPERADOS DURANTE EL DESDOBLAMIENTO.

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ENCUENTROS INESPERADOS DURANTE EL DESDOBLAMIENTO

Cierta persona que se desdoblaba concientemente, me decìa: Eso de que hay espìritus por todos lados, incluso en la misma habitación de uno, son patrañas. Sòlo de cuando en cuando, al desdoblarme me encuentro con alguna entidad en mi dormitorio. Yo temìa desdoblarme sòlo en pensar sobre estos encuentros. Que de improviso alguna entidad indeseable, me fuera a causar daño.

Yo le contestè: Asì es que por el hecho de no ver a ninguna entidad en tu cuarto al momento de desdoblarte, ¿crees que no hay ninguna en ese momento? ¡Asì lo creo!, me respondiò con toda seguridad.

Tenìa razòn al decir que en la mayorìa de las veces, al desdoblarse, no veìa a ninguna entidad en su cuarto. El hecho de que no las viera, no querìa decir que no hubiese ninguna allì. Los propios espìritus desencarnados no se pueden ver todos ellos a todos ellos. El cuerpo espiritual tiene un estado vibratorio de acuerdo a lo evolucionado que sea el espìritu que posea ese cuerpo.

Nunca pude hacer el experimento de que un desdoblado, al desdoblarse encontrara en su propio cuarto a otro espìritu encarnado pero desdoblado. No encontrè el sistema para averiguar a travès del sujeto desdoblado con el que experimentaba, que me diera razòn si en el ambiente en el que se habìa desdoblado habìan màs espìritus en ese estado. Me respondìan: ¡No! Nohay màs, Solamente hay uno. Pero……¿habìa sòlo uno? ¿Con las entidaes desdobladas no podrìa suceder lo mismo que con las entidades desencarnadas? Que no todos pueden ver a todos? ¿Y que se aplica con los encarnados tambièn el mismo principio de la afinidad evolutiva del espìritu para poder verse unos a otros, y nunca tampoco todos a todos, como los desencarnados?

No nos extrañe que por este principio, una persona al desdoblarse no encuentre ninguna entidad encarnada o desencarnada en su dormitorio, o en el ambiente en el que se desdoble.
Probablemente haya una o unas, pero no estàn en el rango evolutivo del que se desdobla, y que al no verlas, pase por el lado de ellas y no haya ningùn: ¡Buenas noches!, y menos una sonrisa de saludo, o una venia.
Pasa de largo, y una de las entidades que estàn allì pensarà: ¡Que tipo de porquerìa! ¡Què mal educado! Pasa a mi lado y ni siquiera saluda. Pero èl mismo ha pasado por el lado de otras dos entidades que estàn en la habitación, y tampoco las ha saludado……¡porque no las ve! Y los tres son espìritus.

Si nos desdoblamos y encontramos parientes o amigos esperando por nuestro proceso, serà porque hemos hecho ese acuerdo con anterioridad, nunca porque al desdoblarnos tenemos la obligación de encontrar a algùn pariente o amigo. Puede que hasta en esas aventuras de desdoblamientos, nos encontremos, porque nos està esperando alguna entidad desencarnada con la que hemos hecho amistad.

En algunas de las narraciones sobre desdoblamientos imperfectos, se habla de que el proceso no progresò porque durante se estaba desdoblando viò una figura horripilante.
Esto puede deberse a:

Un espìritu bromista creò una forma de pensamiento horripilante con su cuerpo espiritual para que se asustara el que duerme en ese cuarto cuando se desdoble conciente o inconcientemente.
Al ver esa figura el miedo hace que se produzca una catalepsia astral, (asì la llaman), y es porque ni cuerpo fìsico, ni cuerpo espiritual pueden moverse ni un milìmetro, y asì quedaràn durante unos minutos hasta que se recobre el movimiento corporal.

Algunos “entendidos” explican este fenòmeno como “paràlisis de sueño”, (¿?). Asì es que ya lo saben, tengan a mano una silla de ruedas para cuando el sueño quede paralìtico. ¡Por Dios¡

Si persiste con estos miedos y tiene toda la facilidad de desdoblarse concientemente, ¡olvìdelo! No trate de tener conciencia y deje que el proceso sea como el de casi todos: ¡Sin memoria! Pero haciendo eso………..¡No sabe lo que se pierde por el miedo!

Pròximo escrito en este mismo tema: CASO DE TURBACIÒN EN DESDOBLAMIENTO CONCIENTE.