Yo de hecho tengo un dios, se llama dinero:
- Tengo que sacrificarme para conseguir cosas de él.
- Me da lo que necesito en la medida en que lo necesito.
- Se manifiesta de muchas formas: billetes, monedas, plástico.
- A pesar de que nunca he visto siete millones de dólares, sé que existen.
- Sin él no podría vivir.
Que el dinero los bendiga.