Iniciado por beltroni
Recuerdo que una vez fui a misa con Tía Teresa sin que fuera una boda o bautizo o alguna de las muchas ocasiones en las que sí que he coincidido con ella por motivos de algunos compromisos. Me acuerdo que una vez en la puerta de la iglesia había un hombre joven pidiendo limosna. El tipo tenía todo el aspecto del típico perroflauta que hubiera hecho un pacto con el Diablo para que jamás le tocase el agua. Mi tía se acercó a él y sacó un billete muy grande, se agachó e hizo ademán de poner el billete en la cajita de cartón que tenía el guarro aquel a modo de caja de caudales. Justo antes de soltar el billete, le preguntó: "¿Qué serías capaz de hacer para ganarte este billete?" El tío, con los ojos como platos le contestó: "¿Y qué tengo que hacer para ganármelo?"...
Mi tía se incorporó y me entregó a mí el billete y le dijo al chico: "A tu edad y en tu estado no creo que seas tú el que tenga que poner las condiciones para ganarte esto. ¿Acaso hay cosas que no harías? Pues si hay cosas que no harías por ese dinero es que no te hace mucha falta"
Entramos en la iglesia y el perroflauta se quedó con cara de gilipollas y diciendo no sé qué de meapilas, fachas y algún qué otro viva a la revolución bolivariana (si es que ya estaba en marcha entonces)
Ya dentro de la Iglesia me dijo mi tía: "¿Lo ves sobrino? Si yo hubiera sido muy religiosa ese dinero se hubiera perdido, pero como no lo soy...¡échalo en el cepillo que seguro habrá quien sepa usarlo mejor que el golfo de fuera!
Pd. ¡¡Qué trabajito me costó dejar aquello en el cepillo...!!
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