La tela de la Sábana de Turín.

En 1973 se hizo un completísimo estudio textil de la tela por el profesor G. Raes director del "Laboratorium de Meulemeester voor Technologie der Textilstoffenrijks Universiteit Genit"
El estudio se hizo sobre algunos hilos de los bordes y algunas muestras de los márgenes.
Las conclusiones fueron las siguientes:

1º.- La confección es muy particular, con trazas de algodón Gossypium herbaceum que sólo se da en Oriente Medio en el siglo I. El resto de algodones que se usan hasta hoy en día son de origen americano. De hecho las primeras manufacturas que se hacen en algodón en Europa son del siglo XVII. El tejido no pudo ser fabricado más que en Oriente.


2º.-
Este tipo de tejido en "saga de pez" y con estos materiales, sólo se dio hacia el siglo I de nuestra era.

3º.- El telar en el que se hizo era una máquina a pedales, probablemente importado de Egipto o copiado de allí. Era corriente este tipo de telar desde hacía muchos años a orillas del Nilo.

4º.-
El tejido de lino fue blanqueado después de confeccionado. Este método dejó de utilizarse hacia el siglo VII, fecha en la que empezaron a blanquerse los hilos antes de tejer la tela.

5º.- No hay trazas de lana. Esto es muy importante porque en todos los telares se utilizaban indistintamente las máquinas para tejer las telas de lino, algodón o lana excepto en Judea. La Ley prohibía expresamente mezclar en el mismo telar, fibras animales y vegetales.


6º.- El polen encotrado en la tela, marca milimétricamente el recorrido que narran los textos históricos. La cantidad de polen encontrado no deja lugar a dudas de los lugares por los que pasó la tela, encontrándose especies endémicas de Judea.

7º.- Curiosamente el Sudario de Turín guarda similitudes importantes con otra tela igualmente atribuida al siglo I que es el Pañolón de Oviedo. Un "tafetán" también de lino que la tradición y las pruebas documentales afirman que corresponde al sudario con el que se cubrió el rostro de Jesús al ser descendido de la cruz. La manchas de sangre son coincidentes, el polen también lo es y el tipo de lino que se utilizo también.



Difícilmente, con las pruebas aportadas por estos estudios podemos llegar a la conclusión de que la tela es de la Edad Media.


Imagen de la tela ampliada.