Una conocida traía esa misma canción antes muerta que sencilla cada que sonaba su movil quería aventarlo bajo las ruedas del próximo vehículo.
Muy buen relato.
Saludos
Una conocida traía esa misma canción antes muerta que sencilla cada que sonaba su movil quería aventarlo bajo las ruedas del próximo vehículo.
Muy buen relato.
Saludos
«The brain is the seat of madness and delirium.»
¡No les dé ideas a mi muy, muy, muy íntima, entrañable amiga y a su ricura de mellizas!, ¡por favor!; ¡ya sólo me faltaría que cada vez que las llamo me sonara eso!
La vida misma, chérie; ni más ni menos.
Siempre, en cualquier caso, a sus encantadores pies, mi muy querida, estimadísima Amanda.
Jaume de Ponts i Mateu
Era una forma de hablar, mi muy estimada Amanda...
En realidad, chérie, ni mi amie es aficionada a los foros ni sus hijas tienen en la Red otros intereses que bajarse musiquitas y parlotear en sus chats.
Insisto: era una forma de hablar no más; quizá, intuyo.., algo desafortunada.
Ruégole, en consecuencia, tenga a bien aceptar mis disculpas por ello.
Siempre, en cualquier caso, a sus encantadores pies, mi muy querida, estimadísima Amanda.
Jaume de Ponts i Mateu