Cuenta la historia, que un dia 9 de diciembre del año 1531, la virgen María se le aparecio a un hombre, cuyo nombre cristiano era Juan Diego, y le encargo que visitara al obispo fray Juan de Zumarraga, para que le construyeran un templo en el cerro del Tepeyac, lugar de las aparicones.
Juan Diego cumplio su misión, pero el obispo no le creyo, asi que le pidio una prueba de su encuentro. Cuando el hombre le dijo esto a la virgen ella le ordeno juntar unas rosas que por "milagro" florecieron en ese cerro semidesértico y se las llevara al obispo.
Era la mañana del día 12 de diciembre cuando Juan Diego se presento ante el obispo Zumarraga, dejo caer las rosas que llevaba en su "ayate", y "milagrosamente" aparecio la estampa de la virgen impresa en el.

Mas de 450 años despues, existen dudas sobre la veracidad de esta historia, incluso se duda que Juan Diego halla existido realmente. ¿Razones?

Ningún historiador de la época menciona estas apariciones, historiadores confiables como Bernal Diaz del Castillo, que vivio en esas epocas de la conquista (recordar que la caida de México Tenochtitlan ocurrio apenas 10 años antes, 1521), ni siquiera hubo mencion por parte del conquistador, Hernán Cortés, ni siquiera algo escrito en las memorias del mencionado obispo Fray Juan de Zumarraga hacerca del acontecimiento, ni siquiera menciona levemente al indigena Juan Diego.

La primera vez que se mencionan las milagrosas apariciones fue hasta 1648, ¡¡¡117 años despues del supuesto hecho!!!

Además, se cuenta que las primeras imagenes conocidas de la virgen, representaba a una mujer blanca, la cual no fue muy bien recibida por los nativos, por lo que despues fue cambiada por la imagen de una virgen morena, pero con una similitud con la imagen de la virgen de la Inmaculada Concepcion.

No es un misterio que los conquistadores españoles destruian los lugares de adoración de los mexicas, y construian sobre de estos los templos católicos. Curiosamente, en el cerro del tepeyac se encontraba un adoratorio dedicado a la diosa Tonantzin, donde desde ya en esas épocas habia una gran migración de personas hacia el Tepeyac para adorarla. No seria raro suponer que los españoles aprovecharon esta adoración a la diosa para imponer a la virgen de Guadalupe, y claro, inventando una historia y cambiando la figura de su diosa por una conveniente imagen de la virgen Maria.