Bagunça

[Ifigenia´s]

No te digo el nombre del que lo inventó para que no corra la sangre, pero...... ¡A mí me gusta...!

Nooooooooooooo...!

[Zampabol]

Nooooooooooooo...!

He dicho que no te voy a dar el nombre....


:001_tt2:

[Ifigenia´s]

He dicho que no te voy a dar el nombre....


:001_tt2:

¿Se dice el pecado pero no el pecador?

[CIKITRAKE]

¿Se dice el pecado pero no el pecador?

Ifigenia, yo sé el "pecador" pero no lo voy a decir y como se están poniendo las cosas,.... creo que habría que platear un cambio en la próxima junta de "honorables". Se me ocurren un par de nombres, pero eso, solo lo voy a desvelar en presencia de nuestro fundador. Saludos y me alegro de tu presencia en el foro.

[Rusko]

¿Cambio de nombre?. mmmmmmmmmmmmmmmmmm, ¿y qué nombre nuevo se le podría poner?
- Con teclados y a lo loco
- Los innombrables
- Los peculiares
- Los hegemónicos (dedicado a Ifigenia)
- Ángeles y demonios (ya sabemos quiénes son los ángeles y quiénes los demonios)
- Santiago y cierra España (también dedicado a Ifigenia)
- Los sangre azul del foro
- Nosferatu



No soy muy bueno con eso de los nombres. Mejor que lo elijáis vosotros…

[EsquizOfelia]

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Por esas cosas locas que tienen las políticas monetarias internacionales, nos es más barato tomar vacaciones en Europa que en nuestro país. Por eso, con mi novio “pro tempore” y otras dos parejas, nos fuimos a visitar la Vieja Dama.

Mi peor es nada, al ver una señal de tránsito gritó: PROHIBIDO! Y quedó todo emocionado.
(Estábamos llegando a Holanda, donde justamente lo “prohibido” son pocas cosas).

-Se escribe bien parecido al alemán, solo que “verboden” es con D y no con T.

Poco después, mientras yo estaba tratando de ver molinos, o los famosos jardines por la ventanilla de la camioneta, otro grito:

-Farmacia! Es casi Apotheke, solo que termina en eek.

Hacía años él había estudiado um poço de Alemán, y casi lloraba toda vez que reconocía una palabra en holandés.
Después de 16 palabras y 16 grititos, perdí la paciencia. Le pregunté si todavía no se había dado cuenta que las dos lenguas se parecían en mucho. Cosa que era algo más que obvio.
Se enojó por mi comentario y a partir de ahí, apenas daba un saltito silencioso cada vez que entendía un letrero.

Sacando este pequeño “Conociendo a Esquizo en pocos pasos” todo fue bárbaro y nos divertimos muchísimo.

Muchas gracias a los amigos que no dejaron morir a Bagunça.


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[MagAnna]

Ah! Me alegro mucho de que te lo pasaras como nunca! :001_smile:
Te compraste zapatos allí? (son de lo mejorcito). Trajiste el chocolate que te pedí? Y los tulipanes también? Bien. Me encanta cuando te vas y vuelves más cargada!
Rerere... bienvenida Home!

[EsquizOfelia]

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No fue por casualidad que ganaste el Premio Fresa.
Gracias MagicAnna.


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[EsquizOfelia]

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Cuando la gente escucha “Frankenstein” inmediatamente lo asocia con el monstruo de la novela de Mary Shelly (Wiki dixit).
Pues es un error.
Frankenstein es el apellido del médico que crea la criatura.

Sin embargo… entiendo que el verdadero monstruo es el doctor, y no su creación. Y es sobre esto es que quiero escribir.
En su arrogancia y locura, Víctor Frankenstein se cree el Prometeo moderno, que rechaza los límites de la vida (y de la muerte) y quiere dominar nuestros tiempos biológicos. La propia autora del libro, nos deja traslucir su compasión por la criatura, y es implacable con la caracterización del médico en su ambición sacrílega y destructiva.
Me acordé de Frankenstein cuando asistí (bajo protesta) a la entrega de los Oscar. Para entregar la estatuilla a no sé quién, ni por qué cosa, entró Kim Novak! Mi actriz preferida de las antiguas, inolvidable por su actuación en “Vértigo”.

Me dieron ganas de llorar.

Con sus 81 años, desfigurada a golpes de bisturí, inflada de botox, con implantes dentarios inspirados en una quinceañera, un rostro petrificado, frases murmuradas por la obvia imposibilidad de pronunciarlas con aquellos labios inflados y mucho menos de sonreir. El “rejuvenecimiento” de la diva, era más ofensivo a mis ojos, que cualquier envejecimiento imaginable. ¿Es que nadie le habrá dicho a esa mujer, que su rostro era la prueba material de un crimen?

Creo que no.

De vez en cuando la cámara daba un pantallazo a la platea donde estaban los veteranos famosos, y eran todos la misma caricatura grotesca.
¿Es que no existe una regla moral-ética para los cirujanos, que alimentan falsas expectativas, sabiendo de antemano los resultados? ¿Será que el cirujano es apenas un profesional amorfo y sin conciencia, que ejecuta cualquier locura que le pidan desde que sea muy bien paga?

Mirando a Kim y otros “monstruos” que habían en la entrega de la famosa estatuita, coincido con un artículo que salió en el Post sobre este tema: El verdadero monstruo está en su clínica, y con la lista de espera completamente llena.


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[Zampabol]

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Cuando la gente escucha “Frankenstein” inmediatamente lo asocia con el monstruo de la novela de Mary Shelly (Wiki dixit).
Pues es un error.
Frankenstein es el apellido del médico que crea la criatura.

Sin embargo… entiendo que el verdadero monstruo es el doctor, y no su creación. Y es sobre esto es que quiero escribir.
En su arrogancia y locura, Víctor Frankenstein se cree el Prometeo moderno, que rechaza los límites de la vida (y de la muerte) y quiere dominar nuestros tiempos biológicos. La propia autora del libro, nos deja traslucir su compasión por la criatura, y es implacable con la caracterización del médico en su ambición sacrílega y destructiva.
Me acordé de Frankenstein cuando asistí (bajo protesta) a la entrega de los Oscar. Para entregar la estatuilla a no sé quién, ni por qué cosa, entró Kim Novak! Mi actriz preferida de las antiguas, inolvidable por su actuación en “Vértigo”.

Me dieron ganas de llorar.

Con sus 81 años, desfigurada a golpes de bisturí, inflada de botox, con implantes dentarios inspirados en una quinceañera, un rostro petrificado, frases murmuradas por la obvia imposibilidad de pronunciarlas con aquellos labios inflados y mucho menos de sonreir. El “rejuvenecimiento” de la diva, era más ofensivo a mis ojos, que cualquier envejecimiento imaginable. ¿Es que nadie le habrá dicho a esa mujer, que su rostro era la prueba material de un crimen?

Creo que no.

De vez en cuando la cámara daba un pantallazo a la platea donde estaban los veteranos famosos, y eran todos la misma caricatura grotesca.
¿Es que no existe una regla moral-ética para los cirujanos, que alimentan falsas expectativas, sabiendo de antemano los resultados? ¿Será que el cirujano es apenas un profesional amorfo y sin conciencia, que ejecuta cualquier locura que le pidan desde que sea muy bien paga?

Mirando a Kim y otros “monstruos” que habían en la entrega de la famosa estatuita, coincido con un artículo que salió en el Post sobre este tema: El verdadero monstruo está en su clínica, y con la lista de espera completamente llena.


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Y yo pensando que la señorita estaba sacando lustre a algún lavabo perdido de algún barucho de carreteras y resulta que se estaba codeando con lo más granado del panorama de momias del celuloide...¡¡Vivir para ver!!

Sí que es verdad que habría que detener y torturar a más de un cirujano, pero lo que yo creo que habría que hacer es poner un impuestazo de lujísimo a todo aquel que por capricho y no por necesidad obvia y manifiesta, se sometiese a una operación de ese tipo. Es decir: si ponerse cara de momia, hincharse los labidos para que parezcan dos butifarras cuesta euro arriba/euro abajo, 20.000 euretes, eso llevaría aparejado un impuesto de diez veces el coste de la operación para pagar el arroz o las medicinas de los más necesitados. Curiosamente, toda esta gente que se gasta fortunas en aparecer más joven y más idiota, suelen ser del género progre que manifiesta en público su amor por los perritos y por los niños de Namibia.
Lo dicho...aunque cobrando diez veces el precio de la operación quizá me quedase corto...

¿Cuánto pagaría en impuestos este/a?