El cine me gusta, sí. Pero como están las cosas en la calle, prefiero ver las películas en la tranquilidad de mi hogar. Apagamos todas las luces, compramos pop corn, toda clase de 'snacks' y dulces; y la pasamos a todo dar. No está mal el cine una que otra vez para mí, pero mientras pueda, seguiré utilizando de cine la seguridad y comodidad de mi propia casa.