Hoy muchos festejan el asesinato de Bin Laden
La operación montada por USA se llamó "Gerónimo" y nunca más acertado e irónico que mencionar al jefe apache que luchó a muerte en el siglo XIX con los invasores de sus tierras ancestrales y destructores de sus costumbres y formas de vida, los mismos que hoy arrasan las tierras y propiedades de cualquiera que se les oponga en el camino.
Como él, como el jefe apache, este multimillonario saudí, aborrecido y odiado por Occidente, es alabado y considerado un héroe por decenas de millones de personas en el mundo musulmán por haberse atrevido a desafiar al país mas poderoso de la tierra, al que consideran ser el principal generador de desestabilización, genocidio y miseria en muchos países árabes de África y Asia.
Bin Laden se alzó, antes que contra Occidente, contra los regímenes dinásticos, despóticos de príncipes, jeques y emires autodeclarados herederos de la voluntad divina, dueños de incalculables riquezas que derrochan por el mundo manteniendo unas formas de vida fastuosas al tiempo que mantienen a sus pueblos en la peor de las miserias.
Bin Laden puso su fortuna al servicio de una causa: la libertad de esos pueblos, abandonó una vida regalada, por otra de privaciones, peligros e incertidumbre. Una década vivió en agujeros de las montañas.
Se equivocó al creer que podría usar al imperio anglojudaico para lograr sus fines, por el contrario ellos lo usaron a él, y hace pocas horas, lo tiraron a la basura ya que no les servía más.
Cuidado cuando festejamos la muerte
de un hombre que pudo valer mucho más
de lo que nosotros podríamos valer
en cien vidas.
Slds.