Mi querido Renato:

-Siempre serás un Caballero en busca de misiones enaltecedoras..

-Y en estos tiempos esa actitud es todo un tesoro..

-Nunca cambies, ni modifiques tu valores...

-Te hacen un ser de excepción...

-Y como ya lo dije en otra ocasión...

No creo en el nunca ni en el siempre...

-Estaré esperando tu regreso, con tu mismo espíritu bueno, cálido, decente, caballeroso..

Llévate un beso como reconocimiento de el gran afecto y respeto que te tengo...

Hoy también estaré tristita...




---