Había una vez, espacio entre cuerpos femenino y masculino; serafines, querubines... vigilaban queriendo desnudarse inmediatamente.
Luego, decidieron que las mujeres solteras, comenzando por EsquizOfelia, vengan inmediatamente aquí, de forma inmediata.
Entonces todos se escandalizaron porque siempre estaba de vacaciones pasando la escoba, haciendo espumosas pociones bebedizas, para banearlos con salsa 'putanesca', de esa pegajosa leche de Mípalo que sirve para enjuagar los pelos de la axila de gorila africano...