América Latina Entre 1825 – 1899.

El proceso de Formación de los Estados Nacionales. (1826 - 1885)

La Historia Latinoamericana, tras la derrota del colonialismo Hispa panó –
Portugués y hasta la década del ochenta del siglo XIX, se desarrolla en un
complejo proceso de formación de la conciencia y el Estado Nacional. La
independencia de las metrópolis europeas en el siglo XIX, si bien significó un
importante paso de avance histórico al conseguir la emancipación política y dar
inicio al ciclo revolucionario dirigido a imponer el capitalismo en América Latina,
no fue capaz de modificar las estructuras económicas y sociales coloniales.

Desde el punto de vista de su contenido clasista, la revolución de
independencia tuvo en América Latina, pese a todas sus limitaciones un
carácter potencialmente capitalista. Al no poderse vertebrar un fuerte
componente social burgués, faltó la imprescindible base social para cumplir las
tareas históricamente maduradas de demoler las relaciones pre capitalistas.

Fase de Predominio Conservador (1826 - 1848)

En esta fase los grupos de la élite urbana – como los comerciantes y
propietarios en proceso de aburguesamiento – perdieron terreno frente a los
sectores rurales tradicionales y la iglesia, menos afectados por los efectos de
la sacudida del orden colonial. El resultado fue un régimen fundado en el
predominio conservador, el cual anuló importantes conquistas de la
independencia y propició el restablecimiento de la esclavitud, los mayorazgos,
los privilegios del clero y el viejo sistema tributario colonial.

Una excepción la constituyó el gobierno dictatorial del Doctor Francia en el
Paraguay (1813 - 1840), quien sacó del poder a la aristocracia criolla, expropió
a la Iglesia y los terratenientes, y propició el desarrollo de una sociedad
campesina igualitaria, dominada por un omnipresente Estado Paternalista. Las
medidas proteccionistas del Dr Francia, junto al aislamiento del exterior,
permitieron cierto florecimiento de las artesanías, algo que también se registró
en la década del 30 en algunos países dominados por regímenes
conservadores: En Chile con Diego Portales, y en México con Lucas Alemán.

La permanente crisis económica y fiscal fue otra de las características de
muchos países latinoamericanos en esta fase- Cuba , Río de la Plata, Brasil, y
en menos medida Chile y Venezuela constituyeron las principales excepciones,
cuando se completó el proceso de formación de los dos partidos tradicionales,
el liberal y el conservador.





Las Reformas Liberales (1849 - 1885)

Las revoluciones liberales adquirieron características distintas en cada uno de
los países latinoamericanos en las que se desarrollaron, determinadas por las
tareas objetivas y el grado de maduración de la sociedad y la conciencia
nacional burguesa, aunque fue muy frecuente que las transformaciones se
realizaran como resultados de reformas” desde arriba”. Entre sus principales
propósitos figuraba: La transformación de las viejas estructuras sociales y
económicas y la necesidad de impulsar el desarrollo capitalista como premisas
para la creación de naciones modernas.

El reformismo liberal, al propiciar la integración económica del territorio
nacional –abolición de aduanas interiores, peajes y estanco, eliminación de
obstáculos a las comunicaciones interregionales mediante la libre navegación
de los ríos, construcción de una eficiente infraestructura (ferrocarriles) etc.-, su
adecuación a los límites formales de las Repúblicas- colonización interior o
conquista de insumisas poblaciones indígenas- y la desamortización de las
formas arcaicas de la propiedad comunal y corporativa (laica o eclesiástica),
impulsó la difusión de las relaciones mercantiles y la ampliación de los sectores
burgueses aspirando a la remodelación del Estado a imagen y semejanza de
los grandes países capitalistas industrializados.

El ascenso de la burguesía y las relaciones capitalistas precedió, acompañó o
sucedió al triunfo de las emergentes fuerzas liberales. Estos procesos,
iniciados con la revolución del medio siglo en Nueva Granada (1849) y la de
Ayutla (1854), se desarrollaron en muchas partes de América Latina en
diferentes momentos del periodo e incluso más tarde (Ecuador y Nicaragua,
por ejemplo), aunque sus reformas fueron más trascendentes donde mayor
peso tenía la herencia feudal colonia. Así, puede considerarse que en buena
medida, las principales Reformas Liberales se desarrollaron en México (1854-
1861) con Benito Juárez; de 1849-1854 y de 1861- 1864.

En gran medida, como resultado de estas transformaciones se perfiló el
territorio correspondiente a muchos países se avanzó en la formación de
verdaderos mercados nacionales y se activó la conformación de la sociedad y
la propia nación, sobre la que los conservadores habían impuesto una imagen
modelada en el espejo de una aristocracia blanca, de raíz española y católica.

Con sus limitaciones, la Reforma Liberal puede ser definida como un intento no
concluido de Revolución burguesa, al margen de diferencias y particularidades
regionales. La aplicación de la legislación liberal en materia agraria y laboralcasi
siempre impulsada “desde arriba”-agudizó en lugar de resolver el problema
de la utilización de la tierra y la explotación del indio.




Aunque casi todas tuvieron un definido carácter antifeudal y anticlerical, solo
cumplieron parcialmente su papel de impulsar las transformaciones burguesas.
Si bien en todas partes se extendieron las relaciones capitalistas, avanzó el
proceso de integración nacional, se instauró el derecho burgués frente a los
privilegios y fueros del viejo régimen conservador y el monopolio territorial fue
quebrantado- allí donde era realmente importante como en México, Guatemala
o Nueva Granada-, no obstante subsistió, e incluso en algún sentido se amplió
la explotación servil de la población aborigen y el predominio de la gran
propiedad terrateniente.

El Capitalismo Dependiente.

A finales del siglo XIX, el capitalismo entra en su fase imperialista. Significaba
entonces, que el capitalismo había desarrollado de una manera tan extraordinaria sus fuerzas productivas, a partir del gran desarrollo tecnológico alcanzado que los espacios conquistados hasta ese momento no satisfacían las demandas de su desarrollo.

Rasgos del Imperialismo:

- Expansión territorial.
- Fusión del capital bancario con el capital Industrial, formándose el capital
financiero.
- Formación de las transnacionales.
- Exportación de capitales.

En América Latina, el establecimiento y conciliación de las relaciones
capitalistas fue consecuencia del extraordinario crecimiento de la economía
latifundista de exportación, en función de los intereses de la burguesía no
manufacturera y de los intereses de las grandes potencias industriales. Estos problemas se relacionan con las limitaciones de las revoluciones burguesas en América Latina y la formación de un capitalismo dependiente.

Las causas que imposibilitar un desarrollo capitalista integral y la creación en el siglo XIX de una verdadera industria nacional, además de relacionarse con las
inmaduras relaciones internas, tienen que ver con la decisiva influencia del
factor externo. Nos referimos a la desfavorable coyuntura histórica, pues ya se
organizaba una división mundial capitalista del trabajo que conduciría a los
países más atrasados a ocupar el lugar de simples exportadores de materias
primas y artículos no elaborados, en un injusto orden internacional que aún
perdura.

Con ello la economía de América Latina experimentó un crecimiento notable pero deformado y se hizo más vulnerable a la crisis capitalista.