CORPUS CHRISTI, EEUU (AFP) — El huracán Dolly ganaba fuerza este miércoles en el Golfo de México cuando se dirigía a la frontera EEUU-México, obligando a evacuar a miles de personas y al personal de las plataformas de las compañías petroleras norteamericanas.

Se esperaba que el huracán de categoría uno tocara tierra "cerca del mediodía" pasara a categoría dos, afirmó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).

Algunas zonas podrían recibir lluvias de hasta 38 cm, con enormes olas e inundaciones, según el NHC. Por eso los residentes de la zona tapiaban las ventanas de sus viviendas y acumulaban bolsas de arena, mientras las autoridades advertían de que algunos diques podrían no ser capaces de contener el aumento del nivel de las aguas.

El gobernador de Texas, Rick Perry declaró el estado de emergencia en 14 condados del sur del estado, y centenares de efectivos de la Guardia Nacional y otros cuerpos de socorro se desplegaban antes de la llegada del huracán.

Con vientos sostenidos de 155 km/h, el huracán estaba a las 13H00 GMT a unos 60 km al sureste del pueblo de Brownsville, en la frontera de Texas.

"El centro de Dolly --que se desplaza a 13 km/h-- llegará a la costa mexicano-estadounidense hacia el mediodía (...) y entonces podría aumentar su intensidad y pasar a la categoría 2", agrega el NHC en su boletín de las 11H00 GMT.

El alerta de huracán emitido por las autoridades concierne a la costa texana desde Brownsville a Corpus Christi, y en México a la costa noreste, desde Río San Fernando hasta la frontera con Estados Unidos.