Un sabio de 77 años me dijo que él había estudiado astronomía y que se había especializado en OVNIS, y que en cierta época de la historia extraños seres atacaron Italia. Dice que él y su equipo lo supieron al excavar en la actual Turín y que encontraron restos de esqueletos que ¡no eran humanos!.
Dice que esos esqueletos tenían el fémur más largo y grueso que el nuestro y el radio y el cúbito más finos, lo cual hacía sospechar sobre la presencia de alienígenas. Un día escuché en un canal de televisión desconocido que podía producirse una invasión alienígena al finalizar el siglo. Dicen que habría tres razones: uno, el planeta se calentaría y los humanos morirían. Dos, un meteorito podría incendiar toda la Tierra. Y tres, los alienígenas habrían descubierto nuestro planeta. Desde 1984, que es cuando hablé con este señor anciano, no dejo de pensar en lo que me dijo. En 1998 fui a un observatorio a explicar lo de este señor y el director del observatorio me creyó.
Sin embargo, los demás dudaban...