Una onda sado :001_tt2:
Printable View
Me dejo pensando, sobre todo eso de las reglas del juego... en fin.
Confieso que, cuando me dedican letras bonitas, me comporto como una reverenda estúpida... aunque siempre he sido una reverenda estúpida.
Hoy confieso que no es igual tomar sol por la noche, ni tomarse un vaso de leche en cambio de uno de trago fuerte, que te haga despertar que dos vasos te hagan dormir y tres te hagan volar sobre los viejos tejados hùmedos, llenos de musgo y caracoles, gusanos, arañas, mariposas y otros amigos de la ilusiòn. Que tomes tres ....y salud.
hoy confieso que cuando le dedico alguna letra a ella, verdadera mente siento que me lleno de nervios y me consume la impaciencia por saber si soy correspondido.
Que sí está surtiendo efecto el otoño en mí. Esperemos al invierno y esas fechas tan difíciles.
No me importa, dejo de hacerlo hace mucho.