¿Cómo tratar el Relámpago Oriental de una forma acorde con la voluntad del Señor?

(I) - ¿Cómo tratar el Relámpago Oriental de una forma acorde con la voluntad del Señor?

Cuando la gente da testimonio de que el Relámpago Oriental es el regreso del Señor Jesús, muchos creyentes consideran que el Relámpago Oriental es el camino verdadero y que deben buscarlo e investigarlo de forma proactiva para oír la voz del Señor. No obstante, los pastores y ancianos religiosos malinterpretan la Biblia para oponerse al Relámpago Oriental y condenarlo. Con el lema de "proteger el camino del Señor, mantener a salvo el rebaño y responsabilizarse de las vidas de los creyentes", impiden por todos los medios que los creyentes investiguen el camino verdadero. ¿Es el Relámpago Oriental el verdadero regreso del Señor, que se manifiesta y obra? ¿Cómo debemos tratar el Relámpago Oriental de acuerdo con la voluntad del Señor?

"A menos que ustedes vean SEÑALES y PRODIGIOS, de ninguna manera creerán (Juan 4:48)". Además, la designación "Relámpago Oriental" me suena a combatiente profesional de la clásica Lucha Libre Mexicana, como el "Mil Máscaras", el "Rayo de Jalisco", "Máscara Sagrada" o "La Parca".

¿CUÁL ES EL RELÁMPAGO DE ORIENTE?

"Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será también la venida del Hijo del Hombre" (Mat 24:27)

Para los que escuchaban a Jesús en la tierra de Palestina, el "oriente" hacía referencia a la región de Mesopotamia y Persia. Solo unos cuantos, los más ilustrados, habían oído hablar de la India (a través de la cultura griega, pues Alejandro Magno había hecho contacto con ellos) y nadie sabía nada de China.

El "occidente" era un lugar algo más impreciso... las tierras a las que podía llegarse navegando por el Mediterráneo: el imperio romano hasta las "Columnas de Hércules" (Gibraltar) y lo que hubiera más allá.

El Cristo, Ese que vendría nuevamente a cerrar todas las eras abiertas desde Adán, a establecer un milenio de paz y derribar el sistema de cosas para establecer uno nuevo, aparecería en Oriente.

Y apareció en Oriente... en Persia, el lugar del que llegaron los sacerdotes zoroastrianos (los conocidos ahora como "Tres Reyes Magos") a saludar el Retorno de su Maestro.

El Cristo, ahora bajo el nombre de "Bahá'u'lláh", fundó las bases del Nuevo Reino, de una civilización planetaria basada en la unidad de las religiones en torno al Único Dios Verdadero y una ética común.

Su mensaje, cual relámpago, inició en Oriente, pero a través de su hijo, Abdu'l Bahá, se manifestó hasta el Occidente.

Abdu'l Bahá, liberado de su presión en Palestina a su debido tiempo, se encaminó en 1912 hacia el poniente, primero a París y a Londres, y luego cruzando el océano a Estados Unidos y Canadá. En este épico viaje predicó la causa de la unidad de la humanidad.

Justo cuando nuestros amigos testigos de Jehová se percataban en 1914 del inicio del reinado de Cristo a través de una "presencia invisible", Abdul Bahá retornó de Occidente, con su misión cumplida, para pasar el resto de su vida sirviendo en Israel.

La civilización occidental, a través de su máximo exponente, los Estados Unidos de Norteamérica, ahora abandera, impulsa y hace visible la obra de la Fe Baha'i en todo el mundo.

Fuera del cristianismo (que agrupa numerosas iglesias y sectas), la Fe Baha'i es la religión independiente extendida en un mayor número de países y territorios.

El Mensaje de Bahá'u´lláh es el Relámpago surgido en Oriente que se ha manifestado hasta Occidente.