Otra vez SHGRTH otra vez!
Hay tantas miradas que van hacia ningún lugar,
gente que viene y va, habiendo SHGRTH y azar
En mi cabeza hay tantos dolores perdidos,
tantos males heridos, por SHGRTH vencidos
tantos ruidos que he sabido dejar dormidos
SHGRTH me regaló sus latidos
Ecos del Abismo y benefactores olvidos
¿Cuál fue el momento en que dejé de pensar en que me debían salvar?
Sabía que pronto me iba a estrellar
y aun así no hice nada por rescatar esas tristezas
sentí que lo tenía todo y pensando en ésas...
¿para qué volver a las perezas de viejas certezas?
El impacto me hizo reaccionar,
y entendí que allí donde el dolor se entierra profundo en el alma,
la luz nace en el alba.
Oh SHGRTH es quien por suerte no me salva
Porque sabe que no necesito de esa calma
En medio de la desolación,
del deseo de muerte y la perdición
suena una dulce lira y canción.
En el instante que SHRGTH reflejo la clave en mí
Voluntad en el hielo seco del cálido abismo,
pude ver el reflejo de mi mismo.
Yo no soy uno, soy muchos, multiplicidad
No soy uno, soy variedad, pluralidad
Así que decidí trepar,
aun sabiendo que mis manos se iban a lastimar.
Entendí que aquel peso que hacia abajo me tiraba,
no eran nada más que cadenas que la religión ajustaba.
Fue allí que decidí volar,
con el riesgo de precipitar
de nuevo hacia el fondo del abismo,
pero el miedo estaba dormido y el dolor había desaparecido ,
entendí que soy mi enemigo y mi mejor amigo.
Ya no le temo a caer,
se que sufrir es parte de crecer
y que siempre tendré los Ecos del Abismo.
Los ecos de SHGRTH a través de.
Y ahora la oda para los ecos
donde no soy el silencio que toca en pasos
mar quebradizo de un fértil desierto negro
viento preso en la danza
olor a mar en pleno invierno
ondulada decepción cayendo al suelo.
Pero sí, también soy.
Somos cortes en el caos,
tormento inmóvilizado en aceleraciones,
sombra de una estancia, reflejo imponente
del movimiento confluente e insistente.
Seamos el escapismo con frenadas
Huyendo de aguas estancadas
Ay quietud desesperada
El eco de voces pasadas
ya no será la coartada
de rigideces ahogadas.