Transitando del ateísmo a la fe
En seguimiento a la petición del compañero Augusto, me permito abrir este hilo para reflexionar si es posible pasar del ateísmo a la fe.
Desde la perspectiva baha'i, Dios es un ser incognoscible, más allá del entendimiento humano, pero no incompatible o en contradicción con el entendimiento humano.
Para acercarnos a Dios, no basta usar el método por el que sabremos si existe agua o no debajo de la superficie helada de Europa, la luna de Júpiter. Debemos también acercarnos con Fe, particularmente en el Mensaje de Aquellos que se han declarado Enviados de Dios.
Ni todos los Mesías o profetas prueban ser verdaderos, ni todos los descubrimientos científicos prueban serlo. Debemos ser escépticos también.
En la vida práctica, tenemos más posibilidades de supervivencia y felicidad cuando actuamos con una mezcla equilibrada de escepticismo y fe, en la justa medida y en ante los aspectos correctos.
Fe es finalmente una confianza que no está plenamente justificada por datos objetivos. Es una confianza que está solo parcialmente basada en tales datos, y que sin embargo, elegimos tener. Fe es "la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve", dice la Escritura en Hebreos 11:1.
Por ejemplo, abordamos un avión con la confianza de que el piloto está adecuadamente entrenado. ¿En qué basamos tal confianza? En datos indirectos y parciales: pro ejemplo, que existen organismos de gobierno que dan licencias a quienes comprueban haber concluido cierto entrenamiento. Esa "comprobación" de entrenamiento es a su vez otorgada por una escuela de pilotos, sujeta a ciertas auditorías de cuando en cuando. También lo respalda la reputación general de la línea aérea.
Todo esto es muy útil para darnos confianza, pero no nos garantiza que el piloto del avión que estoy abordando hoy esté adecuadamente entrenado, ni mucho menos que no se encuentre ese día alcoholizado o deprimido. La acción que decida tomar (abordar o no ese avión) deberá basarse también en la fe (confianza), usando la evidencia indirecta que tengo pero también conciente de que estoy eligiendo creer en el gobierno, en la escuela de pilotos, en la aerolínea y en la propia conciencia del piloto.
Este es un ejemplo de un grado de confianza basado en evidencia relativamente alta.
Hay otros ejemplos de la vida diaria donde la confianza que ejercemos es aún más grande. Por ejemplo, al elegir a una persona como compañera de vida. ¿Conocemos en realidad su carácter, sus aspiraciones, sus debilidades, sus temores y esperanzas? ¿Nos casamos después de hacer una gran batería de tests psicométricos, y de someterla a entrevistas por nuestros familiares, profesores, consejeros matrimoniales? ¿Le hacemos un perfil genético para saber si tiene alto riesgo de cáncer de mama o colon
Ser escéptico es indispensable ("Examinadlo todo, retened lo bueno") pero lo es también tener Fe.
En otro post hablaré sobre cómo la fe baha'i ve la ciencia y la religión como las dos alas del alma humana hacia Dios.
