Sobre la negación de los Testigos de Jehová a recibir transfusiones de sangre
La negativa de los Testigos de Jehová a recibir transfusiones de sangre surge de una malinterpretación bíblica de pasajes como Gen 9:4; Lev 7:27; 17:10-14 y Deut 12:25-28, que hablan de no comer sangre. El contexto de estos pasajes se refriere al sacrificio de animales, donde Dios le dijo a Israel que derramara la sangre de los animales en el suelo, porque la vida de la carne está en la sangre. Cuando se quitaba la sangre, los israelitas podían comer la carne del animal sacrificado.
Nada en estos textos habla de sangre humana, ni habla de transfusiones de sangre, que no guarda relación alguna con sacrificios, donde la sangre se reemplaza en el cuerpo humano con otra sangre humana y no se come. Por lo que los pasajes que los testigos de Jehová usan para apoyar sus negativa de transfundir sangre se usan totalmente fuera de contexto.
Comer no es transfundir. La prohibición de no comer fue más para dejar que la sangre se derrame sobre la tierra con respecto a la vida. Una segunda razón para la prohibición del Antiguo Testamento fue que son los animales utilizados en el altar para expiar los pecados de los seres humanos. Por lo tanto, la sangre se consideraba sagrada. De cualquier manera, comer no tiene nada que ver con la transfusión de sangre. El texto bíblico nunca muestra ningún otro significado. La prohibición es no comer la carne con la sangre. No discuto aquí si el creyente de hoy debe comer carne con sangre. En cualquier caso, este es uno de los pocos requisitos para los judíos del Antiguo Testamento que se guardan en el Nuevo Testamento para los cristianos gentiles. Pero entonces, comprender que prohibir comer carne con sangre significa prohibir la transfusión de sangre para salvar una vida es muy diferente.
La prohibición es comer sangre animal. Jamás estuvo en foco la idea de comer sangre humana. La Biblia no permite el canibalismo, es decir, el acto de comer carne humana, mucho menos el acto de comer sangre humana. Este criterio de interpretación bíblica para acomodar el texto a ideas preconcebidas es tan inconsecuente que hace que sus agentes a cometer incoherencias. ¿Nunca se les ha pasado por la cabeza que al prohibir la transfusión basada en la prohibición bíblica de comer sangre animal, están equiparando sangre animal con sangre humana?
Sangre en una vena no es lo mismo que suero alimenticio. El gran argumento de TJ., Incluso citando conceptos médicos de alimentación intravenosa, que infundir algo en la vena es comida. Incluso puede ser "alimentar", pero no es comer. Se sabe que "comer" forma parte del proceso de alimentar, porque cuando comemos algo estamos llevando para dentro de nosotros ciertos elementos que van a ser distribuidos por nuestro organismo. Pero el acto de comer para alimentarse implica, al final, el acto de tirar a través de los intestinos lo que no es bueno. Y eso sería indigno de la vida que tantas veces era llevada al altar para expiar el pecado. Por lo tanto, concluimos que el acto mecánico de comer puede ser alimentar, pero el acto de alimentar con suero a través de la vena no es lo mismo que "comer", ya que no requiere los actos mecánicos de masticar y tragar.
La sangre inyectada en la vena no es de un animal sino de un ser humano, de una persona viva, no una persona muerta. Un muerto no puede donar sangre. La persona que dona sangre permanece viva, en plena salud. Y la Biblia aquí prohíbe comer la sangre de un animal que fue muerto para servir de alimento. Es muy diferente.
No existe un pasaje bíblico que regule específicamente el tema de la transfusión de sangre, incluso porque este maravilloso recurso médico aún no se conocía. Además, la Biblia misma dice que "donde no hay ley, tampoco hay transgresión" (Rom 4:15). Lo mismo sucede con la ley de las naciones educadas, que dice: "Si no hay ley, no hay crimen".
Esta prohibición, por lo tanto, que ha tomado tantas vidas inocentes y preciosas, viene de una manera incorrecta de interpretar las Escrituras. Afortunadamente, a lo largo de los años, muchas personas han logrado liberarse de estos errores.
