Sé un poco más comedido. En ocasiones llaman a mi puerta correligionarios tuyos. Les digo que yo, tiempos atrás, creí en la Biblia.
Les digo amablemente que no pierdan el tiempo conmigo, puesto que vengo de vuelta. Y si hace calor, les ofrezco un vaso de agua; cosa que no aceptan. Pero nos despedimos casi como si fuéramos amigos.
Por favor, Eli. Desde Internet no fastidies a los que patean la calle. El concepto que tengo hasta ahora de los TD, es que son buenas personas; al margen de sus creencias.