Sobre Isabel Miranda de Wallace
Copío el texto que publiqué algún día de algún año pasado, luego preciso la fecha.
Título: Isabel Miranda de Wallace
La señora Isabel Miranda es una persona fuera de lo ordinario. Extraordinaria porque ha enfrentado su lucha por la justicia, alimentada por el amor a su hijo y por la indignación de ver impune su posible asesinato.
Cuando secuestraron a su hijo Hugo Alberto, el amor de madre y su innata libre conciencia le indicaron el camino que habría de seguir, tortuoso, escabroso, prolongado. Ha tenido que enfrentar a las mafias policiacas, es decir a la parte mas corrompida de las instituciones policiacas; porque es bien sabido que los secuestradores de su hijo eran policías.
Ha tenido que actuar incluso en la clandestinidad, porque hasta los medios de comunicación masiva le niegan el reconocimiento de paladina de la justicia, y le colocan en el ignominioso pedestal de extraño espécimen de rebelde a las instituciones; pretenden hacerla la versión Mexicana del Charles Bronson y la justicia por sus propios medios.
Aquí publiqué un mensaje cuando le asesinaron a su hermana; y aunque nadie ligó una cosa con la otra, es decir el asunto de su hijo con el infortunio de la muerte violenta de su hermana, incluso ni ella misma quiso hacer esa liga; se entiende que su lucha es frontal y por ende ataca no solo a los involucrados, sino al resto de ratas que comparten el nido.
Tratada como un simple manifestante, de esos que se les ocurre cualquier petición y hacen su plantón o su marcha; el estado mayor presidencial la desalojó de los pinos, cuando intentaba entregar una carta al presidente calderón. Y por esta vez, la presión de los medios obligó al presidente a recibirla. No podía ser de otra manera.
Uno a uno han ido cayendo los secuestradores, bajo la presión de la propaganda en anuncios espectaculares pagados por ella misma. Por las ineludibles órdenes de los mandos supremos en el poder judicial, exhortadas por las innumeras antesalas, conversaciones y cartas a cada uno de ellos pidiéndoles que "simplemente hagan su trabajo". Han caído también y sobre todo, por las indagatorias y aportación de pruebas que la Sra. de Wallace ha hecho por su cuenta, arriesgando en ello su propia vida y la seguridad de sus seres queridos.
Afortunada la Sra. de Wallace por poder disponer de tiempo y dinero para perseguir y conseguir la justicia; pero más afortunada aún por poseer esa sed de justicia, o como diría Jesús: "bienaventurada" por éso.
Su historia se sigue escribiendo, ella misma la redacta día con día; y aunque nadie ve aún en ella un ejemplo a seguir, por la sencilla razón de que la gente suele ser cobarde en estos asuntos; es de presentir que el sitio de honor entre los mártires, héroes, luchadores sociales y auténticos filántropos lo tiene ganado desde hace tiempo. Mi reconocimiento para esa gran mujer. Hugo Alberto, esté donde esté, estará feliz de tener una madre de esa clase, que anda por el sendero más limpio que su conciencia le dicta.
Que la historia le haga justicia.
Sobre Isabel Miranda de Wallace
A ese texto que copié en el mensaje anterior, le antecede uno primero y más emotivo, que publiqué en su momento y que lo he perdido, puesto que antes no acostumbraba guardar mis escritos.
En aquél texto, digamos que explicativo e introductorio, manifesté los antecedentes del caso; a grandes razgos que por ahí del año 2005 o 2006, una banda de secuestradores le puso "un cuatro" (celada, trampa) al joven Hugo Alberto Wallace, a través de un señuelo femenino y lo secuestraron. Pidieron el consabido millonario rescate, pero a fin de cuentas asesinaron a Hugo Alberto. A partir de ahí la Sra. Isabel Miranda, esposa del Sr. Wallace y gente adinerada, movió cielo, mar y tierra para localizar al aún desaparecido muchacho Hugo Alberto. Pagó ella investigadores privados, para que le rindieran un informe del trabajo policiaco, así como un investigación paralela a la de la policía.
Uno a uno fué detectando a los culpables del plagio. Se enteró también que su hijo había sido asesinado y desaparecido. Inició una propaganda para hacer caer, en las manos de la justicia, a todos y cada uno de los culpables del secuestro y crimen. Puso anuncios espectaculares en vías primarias, ofreció recompensa por informes que llevaran a la localización y captura de los criminales; y de esa manera ha logrado a la fecha hacer detener, juzgar y sentenciar a cuatro de éllos. No así al cabeza de la banda, el responsable ideológico, material y principal del crimen; a quien sigue persiguiendo y lo seguirá haciendo "hasta el confín del mundo".
Ella se ha sobrepuesto a toda clase de trabas burocráticas, de corrupción en todos los niveles, a la tibieza del apoyo de los medios de comunicación masiva; a un desinterés y apatía aberrantes por parte del sr. Fox, en su momento, y del Sr. Calderón ahora, presidentes ineptos de nuestra Patria.
Ha recibido amenazas de muerte, la han tratado de intimidar. Pero ella es una mujer resuelta, amorosa de lo justo, inspirada por Dios para dar fé de como se entrega una vida por un amor arrebatado, masacrado, abandonado del mundo.
Lo último del asunto, es que se lanzó contra el juez que dictó sentencia a cuatro de los involucrados en el plagio. Sentenciados a 28 años (la mujer), treinta y tantos cada uno de los dos hermanos, y el otro algo así como cuarenta y tantos años en prisión. Considera la Sra. Wallace blanda la sentencia, inferior a lo que señala la ley, y pide juicio para ese magistrado inepto y/o corrompido.
Si tuviese nuestra patria por lo menos diez Isabel Miranda, y que trabajaran por la justicia no sólo porque los ha alcanzado la maldad y la injusticia, sino por vocación... nuestra patria sería mucho mejor de lo que es hoy. Estaría menos podrida.
Un abrazo sincero, cordial, respetuoso y lleno de admiración de mí para la Sra. Wallace. Mi sincero apoyo y mi lucidéz al servicio de su obra. Que Dios siga bendiciendo y guiando su brazo justiciero.
Sobre Isabel Miranda de Wallace
Supuestamente, el argumento del magistrado que dictó sentencia es el siguiente: "El cuerpo (vivo o muerto) de Hugo Alberto Wallace no ha aparecido a la fecha; por lo tanto sólo se puede sancionar el delito de secuestro con las agravantes del caso". Poco mas o menos ese es el razonamiento que fundó la sentencia.
De tal suerte que este último movimiento, jugada, de la sed de justicia de la Sra. Wallace será vano. No así la persecución a Jacobo Tagle Domit, el prófugo "cerebro" maquiavélico del caso en cuestión; sobre el que la Sra. Wallace afirma que se encuentra en un país específico de Asia, no recuerdo cual. Sobre él van enfocadas las baterias de guerra de la Sra, Wallace, y es de esperar que tarde o temprano darán en el blanco y destruirán a ese demonio humano. Tal es la función de un ángel exterminador del mal.
Tanta y tanta gente a la que la ha alcanzado el mal, la perversidad, tanto a ellos mismos como a su gente; y ni así reaccionan, ya no digo con violencia contra el mal, sino con por lo menos ideas, opiniones, lucidéz y una incansable labor de justicia pacífica. Esa es la diferencia primordial entre la Sra. Isabel Miranda de Wallace y el resto de nosotros, aún miserables humanos.
Si de comparaciones se trata
Ahora que en el texto (mensaje) anterior comparé a la Sra. Miranda de Wallace con nosotros, humanos medrosos ante la injusticia, he de poner algo mejor que confronte (sanamente) la grandeza de esta mujer. Y no tan casualmente acabo de buscar información del padre Miguel Agustín Pro, debido a que me vino a la memoria que mi abuela solia referirse en sus charlas (no las recuerdo claras) añejas, a la grandeza de este padre.
Los martires, beatos, santos de la iglesia católica han llevado vidas dignas de leerse, entenderse, apreciarse y tomar de ejemplo; el caso del padre Pro es uno de esos casos; una vida digna, llena de fé, fortaleza y conmovedora. Una persona común, que llegado el momento de enfrentar la injusticia del medio, ponen el pecho con valor y sin perder su sentido de la justicia y del bien. Al padre Pro le tocó enfrentar la persecución religiosa que el presidente Calles emprendió en México en los años 1927 o algo así. Fué acusado injustamente, y tomado como chivo expiatorio para mandarle un "recadito" al papa Pio (no recuerdo el número); fusilado a pesar de que se demostró que era inocente del intento de magnicidio, por el que se le acusaba y fué encarcelado.
En este aspecto se asemeja más el padre Pro a Victor Jara, el músico Chileno asesinado por órdenes de Pinochet: Ambos no usaban la violencia para enfrentar al opresor. Sólo se limitaban a realizar su noble labor, uno el ejercicio religioso, el otro el ejercicio musical.
La Sra. Wallace igual no es violenta, e igual ejerce el único ejercicio que le es dado realizar: el de la búsqueda de la justicia a través de las leyes. Unas leyes que hasta ahora por burocratismo, por corrupción, por ineficiencia no han realizado los actores bien su función.
E igual cabe la posibilidad de que como aquellos, la Sra. Wallace le "colme el plato" a los malignos instalados en el poder; y que decidan lanzar una de sus zarpas contra ella, frágil mujer sedientea de justicia, una vez que los medios (masivos de comunicación) le hayan retirado su atención. Y la dejen en el desamparo, sola en su lucha, olvidada ya porque haya dejado de ser noticia vendible.
Y en ese momento, el de la gran decisión, estoy completamente seguro que ella igual pondrá el pecho al frente; y serenamente levantará los brazos, como lo hacen todos los que aman la justicia; como formando una cruz. Y sea lo que sea lo que termine con ella, lo que pretenda terminar con ella; jamás lo conseguirán.
Y sigue haciendo su historia personal...
No me equivoqué al hablar de ella, desde 2009 en que escribí por aquí y en otros lugares. Una mujer peculiar y agraciada por su vocación de justicia.
Hoy en día es candidata a la jefatura de Gobierno del D.F., y a pesar de ser abanderada por el partido empresrial P.A.N., lo cual es simplemente porque se siente cómoda entre los de su clase; no obsta ello para que siga siendo fiel a su amada justicia. Entre otras cosas le soltó a la gente de "su partido" que el gobierno se hace en las calles, no mandando desde la sala de su casa o en la silla de alguna oficina. Me congratulo con ella, le deséo éxito y el triunfo en las elecciones, a pesar de su partido. Espero la gente pueda reconocer la grandeza de esta mujer, a pesar de los imponderables.
Desgraciadamente en la política la justica es sumamente mensopreciada. Y aquí se verá la real grandeza de esta mujer; un reto nuevo y mayúsculo en su vida.
Sra.Wallace, cuenta usted con el reconocimiento y apoyo moral de Pantera Negra; no así con mi voto, pues pertenezco a otra entidad federativa.
Exhorto a la gente del D.F. a darle el chance que una mujer de su grandeza está solicitando, y estoy seguro que pagará con creces ese voto, para bien de la capital Mexicana; la cual ya requiere de alternancia para evitar amafiamiento de y en el P.R.D., y de una mujer como ella para dar fe y ejemplo de lo que se puede hacer en poltíca en cada entidad federativa en particular, y en la nación en general.
La justicia no tiene nivel económico
Me parece, Yanez, que la fé ciega le hace mucho daño a la democracia.
Ser perredista no compromete necesariamente a votar siempre por todos sus candidatos, en todas las elecciones posibles. Y tampoco el mesianismo es una buena elección.
Creo que un ciudadano debe tener la capacidad de valorar que gente, dentro de sus posibilidades y de entre las alternativas que hay, puede aportar mas al beneficio de la entidad que va a representar o a gobernar.
La señora Wallace porta el apellido de su esposo, empresario y real adinerado en la familia. Ella es mexicana y de apellido Miranda, de los que si debe haber entre la gente que te rodea cercanamente, ¿no?.
Tal como el PRD tuvo ya gobernantes en el Df por varios años (Cárdenas, López Obrador, Ebrard y sus suplentes Robles y Bátiz); y el PAN en el pais por dos sexenios (Fox, Calderón); y el resultado es y sigue siendo un abismo entre las clases. Con el mismo criterio que ambos partidos tuvieron su chance sin haber alcanzado un real éxito en sus gestiones; le toca ahora al que no ha tenido su oportunidad.
Y yo creo en que las mejores opciones, o las menos malas como lo he venido dicendo para no ser tan radical; son López Obrador para el país e Isabel Miranda de Wallace para el D.F.
Y con respecto a la opinión de Lore, de quien tengo un buen concepto con respecto a su criterio; disiento con élla en el asunto ese de la búsqueda de justicia; y ya lo expliqué a detalle en el foro "02 de octubre, que ya se olvide". Y sigo firme en pensar que aún sin dinero, Isabel Miranda habría puesto un ejemplo a toda la cargada de padres del 02 de octubre. Lástima que la historia no compruebe fehacientemente cosas como ésta.
En fin, cada cual sus puntos de vista. Cada cual su lucidéz y su visión y percepción de las personas y sus capacidades; a fin de cuentas el país tendrá los gobernantes que la capacidad o la incapacidad de su gente ponga en las respectivas sillas.