Un gatillazo
Humano soy, lo confieso,
aguanto bien la tensión,
pero a veces la emoción
se convierte en un suceso.
Iba yo como un expreso
directo hacia mi pareja,
que lejos de poner queja
me animaba en el proceso.
Se soltó bien la melena
con la mejor voluntad,
y si digo la verdad
estaba bastante buena.
La pasión mostraba plena,
mostraba sus emociones,
mostraba al par sus pezones
y empezamos la faena.
La mecha ya está encendida.
solo espero que no explote
por tonto de capirote
que no encuentra su guarida.
Sopesando la medida,
que fue calculada a mano,
penetro como espartano
y ella acepta la embestida.
Y estando tan bien hendida
cumple con su traqueteo,
que esfuerzo no escamoteo
por festejar la corrida.
Más se me queda vencida
recogiéndose la pieza,
va y esconde su cabeza
y se me queda dormida.
Lo peor no es el mazazo
ni haber acabado pronto,
es por la cara de tonto
que se te queda al vistazo.
Es en suma un buen planchazo,
pero quien tuvo, retuvo,
que hombre en la tierra no hubo
que sufriera un gatillazo.
