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tomas0402
Había una vez un sabio que enseñaba a sus jóvenes discípulos la mejor manera de afrontar la vida; y sus enseñanzas estaban basadas en sus muchos años vividos, y en sus experiencias.
Percibiendo que sus días estaban próximos a la muerte, puso un extraño problema a sus discípulos. Les dio una semana para su resolución.
Pasados los días, el viejo sabio preguntó a sus discípulos si habían resuelto el problema. Todos dijeron que era un problema muy difícil; que desconocían su solución.
El sabio miró a aquellos jóvenes con ojos de comprensión, y les dijo: - Es cierto. Nunca tendréis capacidad para resolver este problema, pero antes de morir quiero que sepáis su solución -.
Y el anciano dijo a los jóvenes cual era la solución de aquel difícil problema.
Murió el sabio y sus discípulos continuaron enseñando a otros jóvenes las cosas que habían aprendido de su maestro, incluido el problema.
Si alguno de los seguidores del sabio hubiera ocultado la solución del problema que le dio el maestro ¿Estaría actuando con rectitud?
Su maestro se lo hubiera reprochado.